La proptech Houm.com constató una importante reducción en el valor promedio de los arriendos en la Región Metropolitana, evidenciando una caída de aproximadamente el 40% en comparación al promedio máximo obtenido en el 2022. Los altos precios de arriendo en el primer semestre del año pasado, dicen desde la startup, se debieron a la baja oferta de propiedades en el mercado y el alza en la demanda de arrendatarios. Sin embargo, hacia la segunda mitad del año, los precios comenzaron a bajar y estabilizarse.
En el primer semestre del año pasado, el contexto económico mundial marcó una fuerte tendencia en el mercado inmobiliario nacional, al punto de que muchos usuarios debieron posponer la compra de propiedades y mantener el arriendo de sus viviendas.
La inflación, el aumento del precio del dólar y las altas tasas de los créditos hipotecarios, fueron algunos de los factores que generaron que en el primer semestre del 2022 se generara un alza en el valor de los arriendos en varias comunas de la Región Metropolitana.
Así, los precios llegaron a un promedio máximo de $843.214 en abril del año pasado. “Esto fue debido a la baja oferta de propiedades en el mercado de arriendos y al alza de demanda por parte de arrendatarios, al ocurrir este efecto, existió un fuerte incremento de precios en los valores de arriendo por metro cuadrado”, explicó Freddy Servita, supply leader de Houm.
Sin embargo, hacia la segunda mitad del año pasado, los precios de arriendos comenzaron a bajar y estabilizarse, tendencia que ha continuado durante los primeros meses de este año. Según cifras de Houm, el promedio de arriendo en marzo de 2023 se sitúa en $501.160, lo que evidencia una caída de aproximadamente 40% en comparación al promedio máximo obtenido en el 2022.
“Esta gran variación se puede explicar debido a varios factores económicos, tales como el costo de vida para muchos arrendatarios, quienes ya no cuentan con el mismo presupuesto a la hora de cotizar propiedades en arriendo. Por lo mismo, hemos notado más interés por parte de los propietarios en bajar el valor de sus inmuebles en arriendo, buscando mayor velocidad para encontrar al arrendatario y evitar perder dinero con la vacancia de su inmueble”, añadió Servita.