Hennes and Mauritz (H&M), la cadena de moda sueca y principal rival de Inditex (Zara) en el sector, avanza de forma progresiva en la recuperación de los niveles de venta y rentabilidad previos a la pandemia.
La firma ha presentado este jueves sus resultados del tercer trimestre de su ejercicio fiscal, que transcurre entre el 1 de diciembre y el 30 de noviembre, y que dejan un importante hito después de más de un año de impacto de la pandemia.
H&M registró en el tercer trimestre un beneficio neto de 4.692 millones de coronas suecas, unos US$ 530 millones de euros al cambio actual, lo que supone un crecimiento de casi el 160% respecto al mismo periodo de 2020, y más importante, un salto del 21% frente a la ganancia que obtuvo en el tercer trimestre de 2019.
Es la primera vez desde que comenzó la crisis del Covid-19 que H&M supera en un trimestre los niveles de rentabilidad que tenía antes de la existencia del virus.
Sin embargo, esto aún no se traduce en la foto de los nueve meses del ejercicio. H&M sigue acusando los efectos de un primer trimestre que cerró con pérdidas, por las importantes restricciones que sufrieron sus tiendas durante las navidades y el inicio de 2021 por la grave incidencia del virus durante aquellas fechas. En el acumulado, la textil gana 626 millones de euros, frente a las pérdidas de 121 millones que sufrió en el mismo periodo de 2020, aunque esta ganancia está un 30% por debajo de la que registró en los nueve primeros meses del ejercicio 2019.
“La mejora del beneficio en el trimestre se debe, sobre todo, a la buena acogida de las colecciones, con mayores ventas a precio completo, menores rebajas y buen control de costes”, ha valorado la consejera delegada del grupo Helena Helmersson.
“Con nuestra continua transformación y nuestra oferta bien posicionada, somos optimistas de que el grupo H&M tendrá un crecimiento a largo plazo rentable y sostenible”, añade.
Esta mejora de la rentabilidad ha llevado a la compañía a retomar el reparto de dividendos, congelado desde 2019. H&M ha anunciado una propuesta de reparto de 0,6 euros por acción que se repartirá en noviembre.
“Se sustenta en la mejora significativa de la rentabilidad, una positión financiera sólida con una caja de 2.400 millones de euros, unas condiciones del mercado más estables y unas buenas perspectivas. Incluso después del dividendo, la compañía será más fuerte financieramente y capaz de continuar invirtiendo en la propuesta comercial y en el negocio”, explica la compañía.