A 54 días desde que estalló la crisis social en Chile, sus efectos en la actividad y el consumo ya empiezan a evidenciarse. De eso dan cuenta los datos de las importaciones correspondientes a noviembre, que en términos interanuales disminuyeron 8,3%, hasta los US$5.171 millones.
De acuerdo con datos del Banco Central, las compras de los bienes de consumo retrocedieron 11,8%, hasta alcanzar US$1.560 millones. Los bienes durables también registraron una caída en 12 meses de 21,1% hasta US$586 millones. Dentro de este ítem, las variables que registraron un mayor descenso fueron automóviles con una baja de 30%, a US$218 millones; televisores, con un retroceso de 25,2%, a US$36 millones; electrodomésticos, con 14%, y celulares, con una reducción de 11%.
La gerenta de estudios de la CNC, Bernardita Silva, apuntó que si bien los datos solo reflejan una parte de los efectos de la crisis en el comercio exterior, el mayor impacto se verá en los próximos meses dado que descarta que esta tendencia se vaya a revertir. "Probablemente se agudice aún más la caída en las importaciones. Esto como consecuencia de la menor demanda y consumo que existirá en los próximos meses", dijo.
Patricio Rojas, de Rojas & Asociados, señaló que después del 18 de octubre los bienes durables intensificaron su caída, "influidos por las menores expectativas, el mayor tipo de cambio y las perspectivas de que la economía caerá cerca de 2,7% en el cuarto trimestre".
Por otro lado, luego de la caída en octubre, las exportaciones cayeron 12% al totalizar US$5.281 millones.