El dato fue un golpe para los mercados a penas salió en la mañana, pero por la tarde los principales indicadores subían con fuerza. La cifra de inflación de EEUU, conocida en las primeras horas de este jueves, avanzó en septiembre a su nivel más alto en 40 años, subrayando la persistente y elevada inflación que está presionando a los hogares de Estados Unidos y empujando a la Reserva Federal hacia otra fuerte subida de los tipos de interés.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) subyacente, que excluye los alimentos y la energía, aumentó un 6,6% con respecto a hace un año, el nivel más alto desde 1982, según mostraron el jueves el informe del Departamento de Trabajo. Desde el mes anterior, el IPC básico subió un 0,6% por segundo mes.
El IPC general aumentó un 0,4% el mes pasado y un 8,2% respecto al año anterior. La mediana de las previsiones de una encuesta realizada por Bloomberg entre economistas preveía una subida mensual del 0,4% en el IPC subyacente y un aumento del 0,2% en el general.
El avance fue generalizado, pues los índices de vivienda, alimentos y atención médica fueron los que más contribuyeron, según el informe. Mientras que, los precios de la gasolina y de los autos usados disminuyeron.
El efecto en los mercados
La sorpresa causó temor entre los inversionistas, quienes ahora esperan un quinto incremento de las tasas de interés en diciembre, apagando las expectativas de que el banco central pudiera comenzar a reducir sus incrementos pronto.
Así, los expertos coincidían en que con la tasa de desempleo, que volvió a situarse en septiembre en el nivel más bajo de las últimas cinco décadas, y con el dato del IPC, se consolidaría una subida adicional de los tipos de interés de 75 puntos básicos en la reunión de política monetaria de la Reserva Federal de noviembre.
No obstante, las pérdidas iniciales en los mercados se voltearon hasta mostrar números azules. El S&P 500 eliminó una baja que alcanzó el 2%, para cerrar la jornada con una subida de 2,6%.
Según Bloomberg, los niveles técnicos sustentaron las variaciones, pues una oleada de opciones de venta compradas con anterioridad para protegerse de una caída de este tipo se convirtió en dinero, y cuando se obtuvieron beneficios, los operadores compraron acciones para mantener la neutralidad del mercado
Aparte de las acciones, indicó Bloomberg, los precios de los bonos y las criptomonedas también cayeron inmediatamente después de conocerse el dato de inflación.
El Dow Jones se desplomó y el Nasdaq estuvo hasta 3,2% abajo, pero al cierre el índice industrial se empinaba 2,83%, mientras que el tecnológico sumó 2,23%.
Las acciones en Europa también bajaron primero y luego repuntaron, mientras que los rendimientos de los bonos del Tesoro subieron primero y luego bajaron un poco. El valor del dólar contra otras monedas se hundió tras subir inicialmente.
Las acciones en Wall Street han perdido ya una cuarta parte de su valor este año en medio de temores sobre la peor inflación en cuatro décadas y el duro remedio de la Fed para tratarla. El S&P 500 tocó su punto más bajo desde inicios de inicios de noviembre del 2020.
En línea con EEUU, los mercados de Europa también terminaron la sesión al alza. Así, el FTSE 100 de Londres se empinó 0,35%, el CAC 40 francés un 1,04%, y el Dax de Alemania un 1,51%.
Mientras que en América del Sur las bolsas también fueron víctima de la volatilidad y pasaron de las pérdidas a las ganancias
“A pesar de una apertura en rojo, los mercados revirtieron las caídas, mostrando alzas en un contexto en el que los inversionistas especulan que los indicadores bursátiles ya habrían tocado fondo, donde algunos indicadores técnicos también impulsaron el rebote”, comentó el consultor senior de Zurich Chile AGF, Diego Valda.
En concreto, el IPSA, el principal índice bursátil de Chile, cerró con una subida de 0,5%, rompiendo la racha de cinco jornadas consecutivas a la baja. No obstante, el mayor selectivo accionario nacional no logra recuperar lo 5.000 puntos. Cerro en 4.961,09.