Inflación en Estados Unidos sube menos de lo esperado y refuerza expectativas de que la Fed mantendrá la tasa de interés

Los precios al consumidor en Estados Unidos siguieron desacelerándose y aumentaron menos de lo esperado lo que respaldó las expectativas de que la Reserva Federal realizará una pausa en su proceso de alzas en la tasa de interés iniciado en marzo de 2022, decisión que será informada este miércoles al final de su reunión de política monetaria de dos días.

El mercado ahora ve un 98,8% de probabilidades (versus 79,1% de ayer) de que el banco central estadounidense mantenga las tasas de interés en el rango actual de 5%-5,25%, según la herramienta Fedwatch de CMEGroup.

De acuerdo con los datos divulgados este martes por el Departamento del Trabajo, el Índice de Precios al Consumidor subió 0,1% en mayo, cifra menor al 0,2% previsto por el mercado, y que fue explicada principalmente por la baja en los precios del sector energía, en especial de las gasolinas y la electricidad.

De este modo, en 12meses la inflación acumuló un alza de 4%, versus el 4,9% que se había registrado en abril.

Además la cifra fue inferior al 4,1% que proyectaban los analistas y representa el menor incremento interanual desde marzo de 2021.

“Es probable que la caída en la tasa de inflación sea bien recibida por los inversionitas, pero se mantiene obstinadamente por encima del objetivo del 2% de la Fed”, dijo Richard Flynn, director gerente de Charles Schwab UK a Reuters.

“La buena noticia es que la rigidez de la inflación ahora se limita a un número menor de categorías en comparación con inicios de año”, añadió.

En tanto, la inflación subyacente, que descuenta la variación de precios de los productos más volátiles de los sectores de energía y alimentos, subió 0,4% en el mes y acumuló un aumento de 5,3% en 12 meses en línea con las estimaciones de los analistas y también marcando una desaceleración frente a abril cuando fue de 5,5%.

Sin embargo, el hecho de que la inflación subyacente se haya mantenido con un alza de 0,4% por tercer mes consecutivo hace prever a algunos analistas que el banco central estadounidense pueda volver a subir la tasa en su reunión de julio, aunque las apuestas por esta opción también se redujeron tras el reporte.