Ya comenzaron a definirse los últimos detalles de la apertura a bolsa de Inmobiliaria Manquehue, controlada por la familia Rabat Vilaplana.

Luego que se conociera que la compañía abrirá el 37,5% de la propiedad, equivalente a poco más de 221,8 millones de acciones, fuentes que saben de la operación comentan que con ello buscan recaudar entre US$70 millones a US$90 millones, por lo que el precio de colocación de la acción estaría en el rango de $220 a $290.

El porcentaje que se liberará como free float corresponde al 15% de propiedad que tiene Corso, el family office de María Teresa Solari y sus hijos, otro 15% a los títulos que colocará la compañía en la primera emisión y el 7,5% restante a los papeles que venderán los hermanos Rabat Vilaplana.

Los recursos recaudados se destinarán para financiar parte del plan de inversiones inmobiliarias por US$600 millones que desarrollará la firma durante los próximos cinco años.

En una reunión ampliada con inversionistas realizada ayer, José Ignacio Zamorano, director ejecutivo de Investment Banking de BTG Pactual, uno de los asesores del proceso, precisó que esta semana iniciaron los road show con potenciales inversionistas, los cuales terminarán la próxima semana.

Junto con ello, Zamorano detalló que el libro de la subasta se abrirá el martes 22 de enero y se cerrará el 24, por lo que los títulos de Manquehue comenzarán a transarse el viernes 25 de este mes. El otro agente colocador es Credicorp Capital.

Hasta el momento, los inversionistas que han mostrado más interés son fondos de small cap, fondos mutuos y family offices. Algunos de ellos, que ya han participado de las reuniones, señalan que uno de los pro para ingresar a la empresa es que dada sus características, con desarrollos de largo plazo y orientada hacia casas, puede ajustar más rápido su oferta en caso de una desaceleración, y uno de los contra es el mayor costo financiero e inversión que implica mantener grandes paños en el tiempo.

"Llevamos 19 reuniones y nos quedan 10 más", cuenta Fabián Wulf, gerente general de la compañía. El cuestionamiento a los permisos de construcción, dice, ha sido un tema de preocupación planteado por los inversionistas. "Pero hemos explicado que el negocio de casas es mucho más noble en su normativa", señala.

Con 22 proyectos en cartera, para los próximos años proyecta ventas por 28 millones de UF ($1.138 millones), cifra que sube a 36 millones (US$1.463 millones) si se considera futuras ventas de terrenos. En Piedra Roja, en tanto, aún les resta 307 ha disponibles para desarrollar proyectos por los próximo 15 a 20 años.