La inversión extranjera directa (IED) en China aumentó el año pasado a US$139.000 millones, pese a la intensificación de las tensiones comerciales, contrarrestando una tendencia mundial en la que los flujos mundiales se hundieron un 13% desde los niveles de 2017.La inversión extranjera directa mundial disminuyó a US$1.300 billones el año pasado, pero las entradas a China aumentaron un 3,7% desde 2017, según un informe del miércoles de la Comisión Económica y Social de las Naciones Unidas para Asia y Pacífico.

El informe también mostró que, por primera vez, Asia-Pacífico fue tanto el principal destino como la mayor fuente de inversión extranjera directa a nivel mundial. China continuó siendo el mayor receptor de entradas a pesar de la guerra comercial con Estados Unidos.

China fue el mayor receptor de IED por tercer año consecutivo, pero el informe advirtió que podría haber una desaceleración en el horizonte.

"Puesto que lleva tiempo que las empresas diversifiquen su capacidad fuera de China como respuesta a las tensiones comerciales, cuanto más prolongada sea la guerra comercial entre Estados Unidos y China, mayor es la probabilidad de que haya una desaceleración en la IED entrante", dijo el informe.

El informe también advirtió que el lento crecimiento de la inversión entrante en proyectos totalmente nuevos puede obstaculizar la capacidad de Asia-Pacífico para mantener dichos niveles de inversión en el corto plazo.

"Se espera una disminución en los flujos de inversión en 2020 si la incertidumbre relacionada con el comercio internacional continúa y las empresas consolidan sus cadenas de valor", dijo el informe. "Las perspectivas de inversión para la región siguen ligadas a los riesgos resultantes de los trastornos políticos y económicos mundiales en curso".