Un año decepcionante año es lo que cerró este viernes la Bolsa de Santiago. Al cierre de las operaciones de la última sesión del 2018, el principal indicador de la plaza local apuntó una pérdida anual de más de 8%, su peor resultado en los últimos cinco años. La alta volatilidad e incertidumbre a nivel global serían los principales factores que explican el desempeño.
Considerando que el mercado bursátil no operará el lunes 31 con motivo del feriado bancario, este viernes el IPSA vivió su última sesión del año. Al cierre de las transacciones, el balance reveló que el principal indicador apuntó una baja anual de 8,37%, su resultado más bajo desde la pérdida de 14% alcanzada en 2013.
Para explicar el negro año que vivió la bolsa local, la subgerente de estudios de Bci, Pamela Auszenker, puntualiza en el clima de alta volatilidad e incertidumbre que se respiró en los mercados del mundo.
"Ciertamente las tensiones entre EEUU y China, han sido determinantes en el magro desempeño bursátil global, a lo que se suma la latente desaceleración del gigante asiático, que ha golpeado fuertemente a las economías emergentes, y en particular a los mercados accionarios emergentes", explica Auszenker.
A lo anterior se suman las turbulencias políticas que marcaron el año en América Latina, en donde destacan las elecciones en Brasil y la crisis económica que golpea a Argentina.
"Estos dos países son relevantes para la región y para Chile en particular, considerando además la exposición que muchas compañías locales tienen en dichos países. En resumen, fue un año negativo para la gran mayoría de las plazas bursátiles, donde el Ipsa no fue la excepción", concluye Auszenker.
Buenos pronósticos
Pese al negativo desempeño de la plaza local, las proyecciones a futuro son alentadoras. Para el próximo año, BCI Estudios proyecta que el IPSA alcanzaría los 6.100 puntos, considerando variables macroeconómicas y proyecciones de utilidades del selectivo.
Sin embargo, Pamela Auszenke puntualiza en que dichas proyecciones continuarán condicionadas a la evolución de los mercados globales, en donde destaca el desarrollo de la guerra comercial entre China y Estados Unidos.