Japón intervino el jueves en el mercado de divisas por primera vez desde 1998 para apuntalar el maltrecho yen, tras la decisión del banco central de mantener las tasas de interés ultrabajas, que ha hecho caer la moneda.
“Hemos tomado medidas decisivas (en el mercado de divisas)”, dijo a los periodistas el viceministro de Finanzas para Asuntos Internacionales, Masato Kanda, respondiendo afirmativamente cuando se le preguntó si eso significaba una intervención.
El dólar amplió su caída frente al yen y perdía más de un 2% a 141,15 yenes tras la confirmación de la intervención. Anteriormente, el dólar había subido más de un 1% frente a la moneda japonesa, que había alcanzado su nivel más bajo en 24 años.
“El mercado esperaba alguna intervención en algún momento, dadas las crecientes intervenciones verbales que hemos escuchado en las últimas semanas”, dijo Stuart Cole, economista jefe de macroeconomía de Equiti Capital en Londres.
“Pero las intervenciones monetarias rara vez tienen éxito y creo que el movimiento de hoy sólo supondrá un respiro temporal (para el yen)”.
La medida se produjo horas después de la decisión del Banco de Japón de mantener las tasas de interés en niveles extraordinariamente bajos para apoyar el crecimiento económico, en contra de la ola mundial de endurecimiento monetario de los bancos centrales que luchan por frenar la creciente inflación.
“No hay ningún cambio en nuestra postura de mantener una política monetaria laxa por el momento. No subiremos las tasas de interés durante algún tiempo”, dijo el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda, en una reunión informativa tras la decisión.
La decisión del Banco de Japón se produjo después de que la Reserva Federal de Estados Unidos realizara el miércoles su tercera subida consecutiva de las tasas de interés, de 75 puntos básicos, y señalara más subidas, subrayando su decisión de no ceder en su lucha contra la inflación.
El yen se ha depreciado casi un 20% este año, ya que el Banco de Japón ha mantenido una política monetaria extraordinariamente blanda, mientras que muchos de sus homólogos mundiales, como la Reserva Federal, han subido agresivamente los tipos para enfriar la subida de los precios.
El Banco de Japón mantuvo, tal y como se esperaba, los tipos de interés ultrabajos en una reunión de dos días que finalizó el jueves y dejó sin cambios su promesa de mantenerlos en “los niveles actuales o inferiores”.
La intervención de compra de yenes ha sido muy poco frecuente. La última vez que Japón intervino para apoyar su moneda fue en 1998, cuando la crisis financiera asiática provocó una venta de yenes y una rápida salida de capitales de la región.
Antes, Tokio intervino para contrarrestar la caída del yen en 1991-1992.