En la Antigua Roma, los legionarios que actuaban con valor eran recompensados ante todos sus compañeros. Eso cumplía una doble función. Por un lado, premiar a los hombres que habían protagonizado una acción heroica y por otro, ser sin duda un aliciente para el resto de sus compañeros. De manera indirecta, invitaba también a que los imitasen llegado el momento.
La decisión del empresario José Luis del Río Goudie, de convertir en socios a los trabajadores de la empresa que fundó hace 35 años con su familia en Puerto Chacabuco, en la comuna de Aysén (Friosur), da luces sobre la otra cara del empresariado, esa que pocos ven en medio de tanta consigna.
La idea de esta iniciativa, que Del Río ya había compartido con sus trabajadores a inicios de 2018 -antes del estallido social y de la pandemia-, culminó este 2020 con un inédito aumento de capital que él y sus socios no suscribieron para dar paso al ingreso de la propiedad a la cooperativa de sus trabajadores, que alcanzó el 20%.
Se trata de una cifra no menor, que les dio a los colaboradores de Friosur la posibilidad de participar activamente en el directorio, en una medida que implica responsabilidad para ambas partes y, por sobre todo, un tremendo voto de confianza, en estos tiempos complejos, que ha sido calificada por Del Río como “un acto de justicia y un paso natural para consolidar la alianza entre trabajadores, ejecutivos y accionistas”.
Sin duda todos tenemos el deber de aportar para construir un país menos desigual. Y siempre es bueno partir por casa.
En el caso de quienes hacemos empresa, involucrarnos en el desarrollo humano, social y económico de nuestros trabajadores es un gran desafío y una gran motivación.
¿Cómo iniciar este camino? Desde flexibilidad laboral, capacitación, apoyo para emprender, son muchas las formas. José Luis del Río escogió otra, que se suma al camino ya transitado como cofundador de Endeavor y promotor, en diversas iniciativas, de una mejor educación para Chile.
Hoy, cuando nos enfrentamos a una de las crisis sociales, económicas y sanitarias más grandes de nuestra historia, ha llegado la hora de poner en juego toda nuestra capacidad de resiliencia, innovación, abrir nuestras mentes y romper paradigmas. En eso, José Luis del Río ha sido un valiente y, por ello, es un merecido personaje del año 2020.