A poco más de un mes de que el directorio de la Compañía Sud Americana de Vapores (CSAV) colocara sobre la mesa la idea de repartir un dividendo de US$ 170 millones entre los accionistas, la primera iniciativa así en una década, este viernes finalmente la propuesta se concretó.
Una decisión que fue aprobada por unanimidad y que implica la distribución de cerca del 77% de las utilidades percibidas durante el año 2020 cifradas en US$ 222,1 millones, en dividendos correspondientes a US$ 0,0033 por acción, según indican desde la empresa.
Francisco Pérez Mackenna, presidente del directorio, valoró la reestructuración de la compañía ligada al grupo Luksic que hoy les permite contar con números favorables, pese a las dificultades que ha implicado la pandemia.
“Este es un agradecimiento a la resiliencia y confianza de nuestros accionistas, quienes han sido fundamentales para este proceso. Tenemos confianza en el proyecto que estamos llevando a cabo y esperamos seguir creciendo de la mano de nuestros inversionistas”, afirmó Pérez Mackenna.
El gerente general de CSAV, Óscar Hasbún, destacó que, pese a los desafíos que significó la pandemia del Coronavirus para la industria, la compañía cerró el 2020 con una utilidad de US$ 222,1 millones, que corresponde al resultado operacional más alto en la historia de CSAV