Los hermanos Andrea (59 años) y Carlos Heller Solari (61) tienen dos hijos cada uno. Paola y Felipe, por el lado de ella, y Pedro y Alberto, por el de él. Los cuatro descendientes se han convertido con el tiempo en sus consejeros y socios. Y a contar de los próximos meses comenzarán a involucrarse más a la hora de hacer negocios. En el grupo dicen que el ingreso de la nueva generación ha comenzado oficialmente.

No es un paso al costado, ni mucho menos, por parte de Andrea o Carlos, pero la decisión de ambos de separar sus negocios -agrupados en el holding Bethia- implica incorporar definitivamente a sus hijos, quienes ya completaron su entrenamiento dentro de las empresas del grupo y crearon sus propios negocios.

Conocer la interna de las actividades familiares y aprender a “ganarse la plata” fue una de las primeras etapas que debieron cumplir los cuatro nietos de Liliana Solari Falabella (84) antes de entrar de lleno a los negocios familiares. Todos además ya tienen más de 25 años.

Bajo diversas fórmulas, como profesionales, oyentes y aprendices, los cuatro han estado en el grupo y han generado sus propios negocios aparte. “Sus padres hicieron lo mismo y su abuela también. Ella siempre les ha recordado que pasó años atendiendo público en Italmod y a cargo de diversas secciones de Falabella, en Ahumada”, desvelan a Pulso en el entorno familiar.

Además, los cuatro mantienen buenas relaciones y se ven de vez en cuando. Los tres hombres fueron compañeros de rally, jugaron fútbol y aprendieron juntos de los caballos, una verdadera pasión familiar. Incluso, en febrero de 2019, Liliana Solari le donó $200 millones a cada uno de sus tres nietos pilotos.

Por eso, nadie quiere hablar de división entre los Heller. Reiteran que la decisión viene siendo conversada hace más de dos años y trascienden pocos detalles más allá de que cuando en 2012 Liliana Solari inició el traspaso de su fortuna personal a sus hijos Carlos y Andrea hasta concluir en 2014 con una completa reestructuración del grupo Bethia, siempre estuvo en el horizonte que cada rama seguiría un camino propio en el futuro.

Hoy Bethia es un holding diversificado, que agrupa negocios agrícolas como Ancali y los Haras hasta transportes (Sotraser), el canal de TV Megamedia, Club Hípico, una cartera inmobiliaria importante y el 8,5% de Falabella, que esta semana se cotizó en torno a los US$450 millones.

La división societaria está en manos de los abogados Manuel José Vial y Nicolás Tagle, además del ex LarrainVial José Miguel Barros, por parte de Andrea Heller; mientras que a su hermano lo están asesorando el abogado Rodrigo Veloso y el director ejecutivo de Bethia, Gonzalo Rojas.

Las valorizaciones son tarea de Altis, la boutique financiera de Tomás Müller Sproat, que entre sus clientes tuvo al expresidente Sebastián Piñera, cuyo fideicomiso gestionó durante los cuatro años de su mandato. Ya las hizo hace unos meses para las tres empresas cerradas: Sotraser, Ancali y Mega. La porción de Falabella ya tiene un valor de mercado, según el precio de sus acciones.

Por ahora, las negociaciones apuntan a que Carlos Heller quiere mantener en sus manos esas tres empresas y que los hermanos dividirán la participación en Falabella, antaño la pieza central del patrimonio conjunto. Hay una sola restricción que, sin embargo, no impide la escisión: como una de las ocho ramas familiares de Falabella que integran el grupo controlador, no pueden bajar del 8,5% sino hasta 2025, cuando vence el pacto de accionistas que los une. Todo avanza sin prisa, pero sin pausa, relata un conocedor de las negociaciones. Y de modo armonioso, sin hostilidades, agrega.

Sisbrom, un acrónimo de las palabras en inglés Sister, Brother y Mother, será el nuevo vehículo de inversión donde Andrea Heller (59) y sus hijos Paola Barrera (38) y Felipe Rossi (30) concentrarán todos sus negocios, incluidos los que provengan de la división de Bethia, adelantaron a este diario fuentes ligadas al grupo.

La actual sociedad Nueva Romy Limitada, que opera como el family office, será modificada en las próximas semanas y allí convergerán todas las inversiones ya realizadas; la mayoría en el ámbito inmobiliario, en centrales hidroeléctricas de pasada en el sur de país y en venture capital. El nombre surgió después de varias conversaciones entre madre e hijos.

En octubre de 2018, Andrea Heller Solari donó a sus vástagos el 100% de su participación en la sociedad “Inversiones Nueva Romy Limitada”, lo que equivale al 93,4% de la sociedad. A cada uno le correspondió el 46,7% de la firma que entonces tenía un capital de $ 953 millones.

Propietaria y presidenta de Nueva Romy Limitada, Andrea Aida Heller Solari es considerada como una inversionista conservadora, así como una importante filántropa de rescate canino, a través de la fundación Stuka, que preside y en la que también participa su hija mayor, Paola.

Ingeniera civil industrial y magíster en gestión de negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez, Paola Andrea Barrera Heller (38) es desde 2010 asesora de Stuka. En Bethia, trabajó como ingeniero de proyectos, enfocada principalmente en costos.

Autodefinida como “animal lover”, ella misma ayudó a su madre a recoger a los perros que quedaron abandonados tras el terremoto del 27-F, tras lo cual nació la institución. Y aunque vive hace más de dos años en Miami, participa activamente de manera telemática en la entidad. En su currículum figura también haber sido productora de Lusers (2015), una comedia dirigida por Ticoy Rodríguez en la que actuaba Felipe Izquierdo. Lo hizo a través de su sociedad Bamboosa, uno de sus primeros negocios en solitario. Hoy esta actividad está “momentáneamente” detenida, indican en su entorno.

Su padre, el abogado Igor Barrera, la representa en Chile y junto a su hermano Felipe tienen negocios inmobiliarios, principalmente a través de Highlands SPA y sus sociedades hermanas “las Highlands”, como ellos mismos las llaman. Entre sus socios figura la familia Matetic en Inmobiliaria Veracruz SpA.

Paola Barrera Heller es descrita como una persona que evita el protagonismo, a diferencia de su hermano Felipe Ignacio Rossi Heller, quien hasta 2019 compitió en la categoría R5 del Rally Mobil y es ampliamente conocido por su negocio de videojuegos, All Knight.

Ingeniero comercial de la Universidad del Desarrollo, Rossi Heller estudió en Los Ángeles, junto a sus primos Heller Ancarola. Después vivió en Casablanca y en Santiago. El 2019 asumió como director de Inversiones Romy, donde fue uno de los artífices del ingreso del family office a Capitalizarme, la startup de activos inmobiliarios donde también participan Andrónico Luksic, Salvador Said y Paolo Colonnello, entre otros. A sus cercanos, Rossi ha comentado de una conversación que tuvo con Salvador Said donde éste le entregó varios consejos que le han servido para sus propias actividades.

Desde junio de 2020 es director suplente del grupo Bethia, al igual que su primo Pedro. Por acuerdo familiar, a ambos se les creó en ese entonces un cupo en el conglomerado, luego de haber participado como oyentes en los directorios y foguearse, especialmente en el área financiera. Hoy ambos son directores titulares de Bethia, quienes lideran a la tercera generación en el holding.

En abril de este año, Felipe Rossi debutó como director en la mesa de Tottus, la cadena de supermercados de Falabella.

Su gran pasión y donde tiene invertido parte de sus propios recursos es All Knights, una empresa que controla dos equipos profesionales de videojuegos en la que es socio con su amigo Javier Corral, el tenista Cristián Garín y la familia Villanueva. La firma opera en México y hace algunas semanas fichó a un grupo de jugadores coreanos con miras a ganar campeonatos. Es CEO y fundador de la firma.

Casado hace dos años con la también ingeniero comercial UDD Alexandra Riesle, participa además en la plataforma Loops TV, un canal de YouTube y Twitch que tiene más de 287 mil suscriptores. '

Hace algunas semanas, dijo a DFMAS que su idea es convertir a All Knights en una agencia que también ofrezca eventos, programas en vivo y manejo de influencers.

Campeón de Chile en el Rally Mobil categoría R5, entre 2015 y 2018, el nombre de Pedro Agustín Heller Ancarola (35) estuvo durante muchos años ligado a ese deporte y el fútbol. Fue director de Azul Azul, la concesionaria de la U. de Chile, en los años en que su padre la presidía (2015-2019) y, nunca formó parte de la directiva de Deportes Iberia.

Técnico Agrónomo de Inacap, estuvo hasta 2019 en el día a día de Ancali, la productora de leche del grupo que -entre otros- produce marcas propias de lácteos para las cadenas supermercadistas en sus campos de Los Ángeles. Se hizo cargo del negocio entre 2010 y 2014 y siendo gerente de desarrollo de la firma lideró e implementó el proyecto de robotizar la lechería. “Hoy está entre las top 5 de eficiencia a nivel mundial”, cuentan con orgullo en el grupo.

En 2019 asumió como director ejecutivo de Ancali y ese mismo año entró como director oyente de Megamedia y Bethia, donde tuvo como labores ejecutivas la planificación y desarrollo del grupo con foco en innovación. Allí compartió también con sus primos Paola y Felipe.

Desde 2020 es director del conglomerado familiar y estuvo varios meses como director ejecutivo interino de Megamedia, hasta que llegó Javier Villanueva, en marzo del año pasado.

Hasta ahora, sigue muy de cerca el rally y mantiene PH Academia, una escuela gratuita para la difusión de este deporte.

En 2021 creó Agrimaq, una empresa personal 100% suya, de venta de maquinarias agrícolas y mecanización, que lo tiene muy orgulloso y a la que apuesta expandir por la región.

Junto a su prima Paola y su abuela Liliana son socios en el Stud La Nonna, un criadero de caballos de raza que ha ganado numerosos torneos y que exporta ejemplares a los principales mercados hípicos. También controla el stud Drope, a través de Inversiones en Sociedades y Valores Pedro Agustín Heller Ancarola E.I.R.L.

Con su hermano Alberto y su padre son socios de Inversiones Alpes, el vehículo familiar que concentra sus negocios personales y que está constituido por importantes participaciones inmobiliarias, especialmente. En mayo pasado, Inversiones Alpes, junto a su sociedad personal PH inversiones SpA y la de su hermano Alberto, Inversiones AHA SpA, crearon Alpes Ventures, un brazo de nuevos negocios que promete dar que hablar en los próximos años y en el que los Heller Ancarola piensan apostar por los nuevos negocios ligados a la electromovilidad, sustentabilidad y tecnología, especialmente. Alpes Venture SPA nació dotada de un capital de $200 millones, donde los dos hermanos manejan el 98%.

También nacido y criado en Los Ángeles, Alberto, el menor de los Heller Ancarola, quien tiene los mismos 30 años que su primo Felipe, es otro rallista consumado: fue campeón chileno de Rally Mobil 2022 en su categoría.

Ingeniero comercial UDD, hizo la práctica en 2019 en el área logística y distribución en Blue Express, firma de transporte y courier que después fue vendida a un grupo de private equity entre los que figuraban Kinza Capital y Altis Principal Investment.

Hoy es analista de nuevas inversiones en Bethia. Su trabajo consiste en manejar los portafolios financieros del grupo y de manera personal lleva sus negocios a través de Inversiones Aha SPA, que busca impactar especialmente en tecnología, innovación y el negocio inmobiliario.

Es uno de los menos “mediáticos” de los cuatro herederos. Pero en el mundo de las criptomonedas es bien conocido por su firma GreenBit Chile, que se dedica al minado de criptos y al desarrollo de la tecnología del blockchain. La firma posee varias “granjas” de minería cibernética y además vende containers habilitados -llegar y enchufar- para hacer minería de Bitcoin con energía 100% renovable. El 1 de junio pasado, Alberto Heller como su único accionista aumentó el capital de la firma en $ 200 millones, hasta $889 millones.

Las nuevas generaciones ya están dando sus primeros pasos en el mundo de los negocios, como en su día hicieron sus padres y su abuela, Liliana Solari.