Los mercados mundiales siguen en vilo pendientes de lo que sucede con Evergrande. El gigante inmobiliario chino, cuya crisis supone una amenaza para el sistema financiero asiático y global, llegó a desplomarse 19% a mínimos de 11 años en la Bolsa de Hong Kong, en medio de las dudas de si será capaz de honrar sus obligaciones.
La empresa tiene que pagar este jueves más de US$ 83 millones de un vencimiento de intereses de un bono.
En ese contexto, la acción llegó hasta los 2,06 dólares en Hong Kong, el nivel más bajo desde mayo de 2010, aunque ha concluido con un descenso del 10,24%.
Debido a ello, el Hang Seng se desplomó 3,30%, mientras que la bolsa australiana se despidió de la sesión con un retroceso de 2,10%. Las bolsas chinas y de Tokio no abrieron hoy por feriado. En Europa los retrocesos promediaron un 2,11%, mientras que en Wall Street el Dow Jones cayó 1,78%.
Bolsa de Santiago
Los temores que ha provocado la compleja situación financiera de Evergrande se trasladaron también a la Bolsa de Santiago, que inicia la semana post celebraciones de Fiestas Patrias con caídas aún peores que sus pares de Europa, Asia y EEUU. El IPSA, el principal indicado de la plaza local, cayó un 3,90%.
Se trata del mayor retroceso diario desde el 17 de mayo pasado, cuando el mercado reaccionó a los resultados de las elecciones de constituyentes.
“La volatilidad esta presente, y no se aprecia se atenúe en el corto plazo. 68 puntos es la volatilidad intra dia del IPSA, con esto, es de esperar que el IPSA se mueva entre los 4.250 y los 4.450 puntos, dependiendo del desarrollo de las noticias. Por ahora, parece que el sesgo será por la parte baja del rango descrito”, complementó Cristián Araya, de VanTrust Capital.
“A pesar del feriado en China y Japón, el Hang Seng de Hong Kong recogió el temor que provoca la crisis del gigante inmobiliario chino, Evergrande, ya que registró una caída de 3,30%. Lo anterior debido a que la empresa Evergrande, gigante del rubro inmobiliario chino anunció la semana pasada que no hará frente al pago de intereses de su deuda que vence hoy 20 de septiembre”, dijo Guillermo Araya, de Renta 4.
Por esta misma situación, el cobre sufrió su mayor caída en un mes, mientras que el dólar llegó en algún momento a superar los $ 792.
Los inversionistas temen que una posible quiebra del “Gran Rinoceronte Blanco” afecte a toda China, ya que los pasivos de la compañía representan aproximadamente el 2% del PIB del país asiático, reportó CincoDías.
Evergrande ha estado luchando por conseguir fondos para pagar a sus numerosos prestamistas, proveedores e inversores, y los reguladores advierten que sus US$ 305.000 millones de pasivo podrían provocar riesgos más amplios para el sistema financiero del país si no se estabiliza.
El sector inmobiliario, que según los últimos datos disponibles representó el 7% del PIB de China en 2019 y el 17,2% si se suma a las otras industrias que se cruzan con él, viene generando ruido hace bastante tiempo, tanto así que el propio gobierno de Xi Jinping ha intentado tomar medidas para enfriarlo, ante los riesgos sistémicos asociados. De hecho, la crisis de la compañía ya ha comenzado a repercutir en Chile, siendo uno de los elementos que explica las recientes bajas en el precio del cobre.
Evergrande -el segundo mayor promotor inmobiliario en ventas chino- es la mejor exponente tanto del crecimiento del sector, como de sus problemas. Sus activos por un total de 2,3 billones de yuanes (US$ 356.600 millones) y un volumen de ventas anual de más 700 000 millones de yuanes dan cuenta de lo colosal de la compañía, mientras que sus pasivos por US$ 305.000 millones la convierten en la inmobiliaria más endeudada del mundo.
A pesar de la creciente crisis, el gobierno aún tiene que intervenir para evitar que Evergrande se hunda, dijo AFP.
Los analistas consideran que, pese a que los dirigentes buscan frenar la toma excesiva de riesgos, probablemente trabajarán para evitar que el problema se vuelva inmanejable.
“La prioridad de estabilidad social del gobierno central hace que la reestructuración sea probable con recortes para los deudores”, señaló Tapas Strickland del National Australia Bank.