El holding financiero Consorcio, controlado por las familias Hurtado Vicuña, Fernández León y Garcés Silva, tuvo un pequeño cambio de propiedad esta semana. Las tres familias controladoras compraron, junto a su gerente general, Patricio Parodi, el 4,12% de Consorcio Financiero al IFC y Calverton Spain, vehículos de inversión del Banco Mundial, en $73.476 millones, unos US$86 millones al valor del dólar del 27 de abril, día en que se informó el acuerdo.
La transacción se sellará el 29 de junio y adelantó en alguna medida parte de la desinversión de los socios internacionales, con quienes los controladores suscribieron un pacto de accionistas en mayo de 2016 y que considera la apertura a Bolsa antes un plazo de 10 años. El acuerdo lo valorizó Consorcio Financiero en más de US$2.000 millones._El valor libro se acerca a US$1.600 millones.
Consorcio Financiero S.A. ganó $340.200 millones (US$400 millones) en 2021, con lo que la valorización actual es, a su vez, cinco veces sus ganancias del año pasado.
Con la transacción, los Hurtado y Banvida (Fernández y Garcés) se quedarán con el 43,95% cada uno. Parodi, dueño del 5,61% a través de BP S.A., sumará otro 0,26% de la propiedad.
Consorcio, además, tuvo un leve cambio de directorio en su junta anual de accionistas. Los socios renovaron a ocho de los nueve directores: Marcos Büchi, presidente, Bonifacio Bilbao, Eduardo Fernández Mac-Auliffe, José Antonio Garcés Silva, los hermanos Juan y Pedro Hurtado Vicuña, el colombiano Sergio Restrepo y el excontralor Ramiro Mendoza. El único cambio fue el reemplazo de Hernán Büchi, quien renunció a la compañía tras el caso interlocking que le reprochó la Fiscalía Económica por su presencia en Consorcio, Banco de Chile y Falabella.
En su lugar, los accionistas eligieron a Felipe Silva Méndez, ingeniero comercial de la UC con un MBA en Chicago y quien dirige el family office de la familia Hurtado Vicuña, Lota Green. Silva es director de las compañías de seguro de Consorcio desde 2016 y está en la mesa de Polpaico.