Dos con pérdidas y otra con una fuerte caída de las ganancias. Este es el balance financiero que dejó la pandemia en 2020. Los mayores costos a raíz del covid y, por lo mismo, la postergación de cirugías, provocó un fuerte impacto en sus números que, al igual que en otros sectores, comenzó a mejorar desde agosto.
Clínica Las Condes y RedSalud –de la Cámara Chilena de la Construcción (ILC)- terminaron con pérdidas de $5.812 millones y $5.264 millones, respectivamente. Clínica Indisa, con un desplome de 70% en sus utilidades hasta $3.500 millones.
El denominador común es la fuerte caída de ingresos. En Indisa se contrajo 7,21%, en Clínica Las Condes 6,2% y en RedSalud 4,2%.
Esta última firma explica que la primera parte del año estuvo marcada por las medidas de confinamiento que significaron un descenso en las consultas ambulatorias de salud y dental. La atención de salud se canalizó a través de la Unidad de Telemedicina, precisaron. “La restricción de cirugías electivas para destinar los recursos clínicos al manejo de pacientes COVID-19, tuvo también efectos importantes en la actividad de clínicas durante el primer semestre”.
Es que la autoridad sanitaria dictó restricciones y obligaciones especiales como la postergación de cirugías ambulatorias, procedimientos diagnósticos y exámenes de laboratorio e imagenología de carácter no críticos, se suspendieron ciertas cirugías electivas hasta agosto.
Así, el negocio ambulatorio y dental de RedSalud, conformado por más de 40 Centros Médicos en el país, registró una caída en ventas del 2,7% respecto al año anterior ($3.514 millones). En Clínicas, se observó un descenso del 6% ($10.429 millones) en Región Metropolitana y del 5% en regiones ($4.947 millones).
En Clínica Las Condes la menor actividad hospitalaria fue prácticamente generalizada. Los días cama ocupados alcanzaron 74.380 con una ocupación de 81,7%, con un aumento en servicios críticos. La ocupación de pabellones fue 68,8%, con 16.895 intervenciones quirúrgicas, lo que implicó una disminución de 19,5% interanual. Los exámenes de laboratorio presentaron un leve aumento de 2,1%, mientras que la actividad de imágenes se contrajo 31,3%. Las consultas médicas, en tanto, presentaron una contracción de 31,2% al mismo periodo.
Indisa también sintió el efecto en su negocio principal. Los ingresos por hospitalización aumentaron 1,45%, y los ingresos ambulatorios se contrajeron 22,06% interanual.
Costos y gastos
Los costos y gastos de administración, pese al esfuerzo para reducirlos se quedaron relativamente elevados en relación al nuevo nivel de ingresos.
En Indisa, por ejemplo, los costos de ventas en relación a los ingresos pasaron de representar el 73,23% a 78,97%, “producto de la disminución de los ingresos dada la pandemia, y la mantención de los costos de venta por mayor uso de insumos y medicamentos en relación a los pacientes COVID-19”, detalló en su reporte al regulador. Los gastos de administración y ventas con respecto a la venta, quedaron en 16% desde un 14,84% de 2019.
RedSalud vio un alza de 1,6% en el período reportado en comparación a igual periodo del año anterior: “Un cambio significativo respecto de 2019 con impacto en costos operacionales son los Elementos de Protección Personal (”EPP”) para colaboradores y profesionales de la salud, los cuales están asociados a la ejecución de un plan orientado a entregar las mayores condiciones de seguridad”.
El apriete de cinturón en Red Salud se notó en los gastos de administración, que se redujeron en $1.669 millones, gracias a un ahorro relevante en publicidad de $2.527 millones.
En Clínica Las Condes pasó lo contrario. Se redujeron los costos de venta gracias a un menor nivel de siniestros (-8,5%), de -3,7% en servicios externos y -1,3% en materiales. Por el contrario, subieron los gastos de administración en 4,9% por el aumento del monto de indemnizaciones asociados en su mayoría al plan de retiro voluntario realizado en el tercer trimestre.
Cuarto trimestre
También fue común a las tres compañías el que se observó un repunte en el cuarto trimestre.
En RedSalud comentan que se evidencia un repunte de la actividad a partir de agosto y “ya en septiembre se alcanzan niveles de venta superiores a los del año 2019”. De hecho, la venta en el cuarto trimestre fue de $127.380 millones, un 26,9% más alta que en igual periodo de 2019. “Esto se explica porque, a medida que descendieron las hospitalizaciones por COVID-19, en línea con la disminución de casos activos en el país, se produjo un desescalamiento de camas críticas, lo que permitió que la autoridad sanitaria liberara la restricción para cirugías electivas y con esto retomar parte de la actividad de pabellones que se había pospuesto”.
En Indisa la utilidad entre octubre y diciembre de 2020 fue de $3.487 millones, es decir, prácticamente la utilidad lograda en todo el año, y el triple de las ganancias del tercer trimestre de 2020 ($1.173 millones).