En medio del peak del coronavirus, tal como lo ha dicho el propio Presidente, en forma paralela el gobierno está empujando con fuerza la idea de la vuelta a la “nueva normalidad”, con gradualidad. Pese a que distintas actividades están suspendidas o se han postergado -como el proceso del plebiscito constitucional-, sí se está abriendo la válvula para que distintos rubros económicos vuelvan al ruedo, tal como algunos centros comerciales. En este escenario, grandes empresas ya están siguiendo el empujón del Ejecutivo.

“Preparamos nuestro plan de retorno progresivo, el que comenzaremos a aplicar cuando las condiciones sanitarias lo permitan”, indican desde Telefónica Chile y puntualizan que, pese a que alrededor del 95% de su dotación está con teletrabajo, “debido a la alta demanda de nuestros clientes por atención en aquellos servicios que no pueden realizarse de manera digital, hemos implementado un plan gradual de apertura de sucursales en todo el país, con importantes medidas de prevención ante la emergencia”.

La vicepresidenta de recursos humanos de Scotiabank Chile, Jacqueline Balbontín, detalla que en las sucursales que “estamos trabajando en el plan de retorno, el cual será gradual y controlado a partir de la próxima semana”. Mientras que la gerenta general de administración de BancoEstado, Victoria Martínez, avizora que “en la medida que la situación de la pandemia empiece a mostrar tendencia a la baja, está considerado un retorno gradual a la actividad presencial”.

Uno de los principales proveedores de maquinaria industrial, sobre todo para la minería, es Finning. Su vicepresidente de recursos humanos para Sudamérica, Marco Berdichevsky, revela que “esperamos durante mayo tratar de retomar la nueva normalidad que refiere el gobierno”.

La presidenta de la Empresa Nacional del Petróleo (Enap), Loreto Silva, indica que la operación retorno de los funcionarios que están trabajando a distancia será de forma paulatina y en grupos. “No es bueno que de un día para otro entremos todos juntos. Vamos a hacerlo en forma diferenciada, creemos que es el mejor camino no solo del punto de vista logístico, sino también psicológico. Así como la gente se tuvo que adaptar a la cuarentena, ahora hay que adaptarse a salir de la casa de nuevo y hay que perder ese miedo. La gente tiene que sentir que está segura y desde esa perspectiva estamos trabajando en tomar todas las medidas de resguardo en materia de salud, de manera que se sientan seguros”.

El despliegue psicológico

Para preparar la contención psicológica y abordar la vuelta a la nueva normalidad, en Enap cuentan que hace dos semanas crearon un comité especial que trabaja en esto.

Otras empresas están desplegando de forma concreta auxilio psicológico parar sus trabajadores, como isapre Consalud. Su gerente comercial, Harald Chutney, detalla que han dispuesto “para todos los colaboradores acceso a terapias psicológicas a través de telemedicina y ‘psico calls’ para recibir apoyo en estos tiempos de Covid-19. También estamos realizando talleres de coaching para que las jefaturas puedan administrar a sus equipos de personas en este nuevo contexto, donde no se le puede exigir a la gente las mismas cosas que antes y hacerlos sentir que están en riesgo y tampoco se les puede pedir reuniones presenciales”.

Al mismo tenor, desde Carozzi Chile, su gerente de división, Santiago Valdés, detalla que “desde el punto de vista del apoyo sicológico, nuestro foco ha estado en reforzar la cercanía de las jefaturas con sus equipos y hemos entregado herramientas tanto internas como de teleatención para dar contención emocional a nuestros colaboradores”.

En Aza, BancoEstado, Enel, Scotiabank y Walmart también habilitaron plataformas de atención psicológica para todos sus empleados que requieran apoyo y, además, resaltan que están llevando a cabo charlas y talleres para hacer frente al contexto actual, con temáticas como la corresponsabilidad en el hogar, conciliación de vida familiar y laboral, acompañamiento para futuras madres, consejos para padres y, además, envían talleres de actividad física para evitar el sedentarismo, como pilates y yoga. En el caso de la supermercadista, comentan que 800 colaboradores han participado en estas instancias.

La industria minera también está actuando en este sentido, y BHP ha implementado un ‘call center Covid-19’, atendido por profesionales de la salud y, asimismo, mantiene su programa de asistencia al empleado con herramientas específicas para abordar la salud mental de los trabajadores. En tanto, Finning hace un mes que iniciaron la implementación de un soporte de apoyo psicológico para todos sus trabajadores de Sudamérica y también están impulsando capacitaciones de habilidades de liderazgo y otras temáticas de contención para saber cómo están sus empleados, de modo de poder alinear los objetivos del negocio con la salud y bienestar de los equipos.

Reforzamiento de la higiene y subsidio del transporte

Hermann von Mühlenbrock, quien antecedió a Bernardo Larraín al frente de la Sofofa, cuenta que en la acerera Aza, donde es su gerente general, de los poco más de 500 trabajadores que componen la firma, alrededor de 150 pueden hacer teletrabajo, mientras que los más de 300 operarios de la planta han seguido operando en su lugar físico, pero con estrictas medidas de higiene y distanciamiento.

“Desde el 16 de marzo que montamos un comité de crisis que funciona todos los días y hemos impulsado medidas para cuidar a todos los trabajadores, como por ejemplo, cada turno limpia su puesto a la salida y no se topa con el turno entrante, en los comedores hay prácticamente una persona por mesa, hicimos vestuarios y baños separados, dispusimos un sanitizador de zapatos y a diario le tomamos la temperatura y le hacemos una miniencuesta a todos”, detalla.

Incluso, comenta que la empresa le pidió a los trabajadores “que vengan en sus autos -ojalá no compartido- y le pagamos los gastos de transporte y, para los que usan el bus de acercamiento, tratamos que no vengan en él más de 10 o 15 personas, de modo que vayan bien distanciados”. Mismas medidas tiene Scotiabank.

En Consalud explican que “todos están con teletrabajo, pero dispusimos medidas especiales de higiene para nuestros buses de acercamiento en caso que algún ejecutivo comercial tenga que asistir a la oficina por algún trámite que no pueda hacer desde sus casas. Para esos casos, dispusimos de un espacio físico especial -que se higieniza con periodicidad- para que puedan hacer sus actividades por un tiempo breve”.

En el caso de Carozzi, que al ser una industria de alimentos no ha parado su actividad, tienen un comité de crisis asesorado por expertos de salud y alimentación que monitorea en forma permanente el desarrollo de la contingencia, que le entrega información a sus colaboradores para evitar la propagación del virus. También poseen un sistema de transporte interno que se ha visto reforzado de medidas periódicas de sanitización y de distanciamiento. A la entrada de las labores, cada trabajador es sometido a la medición de su temperatura y se le hace entrega de su mascarilla.

Los bancos consultados remarcan que han distribuido importantes volúmenes de mascarillas, alcohol gel, protectores faciales, guantes y termómetros para minimizar los riesgos en el trabajo diario, además de controlar que el flujo de clientes que ingresen a las oficinas sean los adecuados para mantener el distanciamiento recomendado. El BancoEstado puntualiza que suspendieron los viajes y comisiones de servicio, por lo que se ha fomentado el uso de herramientas colaborativas online para las reuniones, evitando las reuniones presenciales y se han implementado elementos de protección en las unidades de trabajo que se encuentran más expuestas a contacto con clientes.

Algunos han ido más allá, como el empresario Gonzalo Martino, quien detalla que en su fábrica de envases, Typack, “contratamos a paramédicos para que estén siempre disponibles en la puerta de las instalaciones”. En tanto Walmart, ha mostrado especial cuidado con sus empleados de mayor riesgo, como embarazadas, mayores de 60 años y enfermos crónicos, dado que les han permitido no trabajar con goce de sueldo y, además, les están haciendo entrega de kits de mercadería, que han llegado a seis mil trabajadores.

¿Teletrabajo para siempre?

Hay casos donde el teletrabajo se ha dado en un ciento por ciento y, pese a ello, las operaciones han continuado completamente normal. Así ocurre en la Bolsa de Comercio de Santiago, donde desde el 27 de marzo la totalidad de sus colaboradores -con la excepción del área de seguridad y mantención del edifico- están trabajando en forma remota, sin que ello haya afectado la continuidad de sus operaciones.

Según encuestas internas de Scotiabank, el 64% de sus colaboradores considera que la experiencia de trabajar desde su casa ha sido muy buena y el 57% considera que el mayor tiempo destinado a la familia es el principal beneficio.

Casos como los anteriores ha llevado a algunos empresarios replantearse la idea de extender el teletrabajo en ciertas áreas de forma indefinida.

En Finning indican que esta pandemia les “ha dado la oportunidad de explorar la modalidad de teletrabajo, la que estamos evaluando para explorar sus posibilidades a futuro al interior de nuestra organización”. El gerente comercial de Consalud va más allá y asegura que “a muchos de nuestros colaboradores, como los ejecutivos que responden reclamos y solicitudes de nuestros clientes que están hoy en formato teletrabajo, los vamos a mantener así de manera permanente, porque han mostrado mayor productividad y tasas de respuesta y, además, han tenido una percepción favorable a esta forma de trabajo”.

El trabajo remoto también ha empujado a las empresas a sacar otras conclusiones. En el caso de la filial local de la firma norteamericana Bank of America - Merrill Lynch, su presidente regional, Manuel Irarrázaval, explica que “con esta contingencia nos dimos cuenta que el trabajo remoto funciona e, incluso, en temas más operativos se han acelerado procesos y tecnologías que nos había costado que se hicieran por parte de nuestros clientes, como la adopción de las firmas digitales. Esta pandemia está cambiando la forma de como vamos a trabajar de aquí en adelante”.

Otros se replantean el prescindir de ciertos espacios físicos. Así, en Finning revelan que “en algunos casos estamos evaluando prescindir de algunas de nuestras instalaciones; pero más que prescindir de lugares, hoy día estamos evaluando su eficacia interna, la evaluación que hacen usuarios y jefaturas, las posibilidades que nos otorga la nueva ley de teletrabajo, para así avanzar en una propuesta de teletrabajo para los roles que así lo permitan”.