La revolución digital y los nuevos desafíos para las empresas en el mundo laboral

Flexibilidad laboral, disminución de riesgos en el trabajo, mayor productividad, reducción de stress y una serie de beneficios adicionales, es lo que ha traído como consecuencia la introducción de nuevas tecnologías en el mundo laboral y empresarial.

Sin embargo, pese a esta serie de ganancias, aún algunos miran con temor estos procesos, sobre todo cuando algunas proyecciones indican que hacia el 2030, entre 400 y 800 millones de personas podrán ver sus puestos de trabajo ocupados por robots u otras tecnologías vinculadas a la Inteligencia Artificial.

Nuestra visión es optimista y estamos de acuerdo con The Center for the Future of Work, que sostiene que se mantendrá la tendencia de los últimos años y continuarán creándose nuevas profesiones para responder adecuadamente a las necesidades que nos impone la transformación digital, tal como pasó durante la primera revolución industrial, con la aparición de las máquinas.

Después de todo, los robots seguirán necesitando de humanos para operar correctamente.

Y tal como ha ocurrido con profesiones como la de community manager, antes de lo que pensamos, podremos ver "gerentes de Equipos Hombre-Máquina", "detectives de datos" o "paramédicos asistidos por IA".

Pero como siempre lo hemos planteado en esta columna, nos interesa revisar qué ocurrirá desde el punto de vista empresarial y entender cómo las diversas organizaciones seguirán enfrentando los desafíos de un mundo cada vez más digital.

En nuestra opinión, muy probablemente, sigan destinando esfuerzos en la búsqueda de nuevos mecanismos para optimizar sus negocios, acelerar la toma de decisiones, potenciar la ubicuidad - para no perder oportunidades - automatizar tareas y mejorar sus canales de comunicación con clientes y empleados.

Del mismo modo, se apropiarán y ampliarán el uso de tecnologías como el Big Data o el Analytics, para dotar de inteligencia comercial sus negocios, para también prevenir, efectivamente, los riesgos laborales y anticiparse a errores "humanos".

Asimismo, comenzarán a utilizar - o intensificarán el uso - de herramientas como drones, sensores y realidad virtual, para supervisar actividades en zonas peligrosas, recolectar datos que generen valor a sus negocios o potenciar el entrenamiento de sus trabajadores en maquinaria compleja, que requieren utilizar a diario.

Otro gran beneficio de la digitalización, es que gracias a los nuevos modelos de negocio, este tipo de beneficios también podrán ser palpables para las pequeñas y medianas empresas (pymes).

Sabemos que el nuevo entorno digital está imponiéndoles diversos desafíos de competitividad , como la adopción de soluciones digitales para dar un salto en materia de operaciones, procesos y servicios, por lo cual, los proveedores de tecnología nos hemos encargado de crear suites ideales para ayudarles a superar estos desafíos.

Hoy, una empresa de cualquier tamaño puede contratar una solución modular, basada en Internet de las Cosas (IoT), que crece con su negocio. Es decir, que puede escoger qué tipo de tecnología necesita: conectividad, seguridad informática, colaboración y movilidad o cloud, y armar una solución con éstas, pagando un valor accesible y recibiendo asesoría profesional para sacar el máximo provecho de ellas.

Cada día más, las empresas de cualquier tamaño se enfrentan a un conjunto de decisiones que serán críticas para obtener el máximo beneficio al momento de transformarse digitalmente, y adecuarse a los nuevos entornos laborales. Porque como ya sabemos, la transformación digital continuará desafiándonos y debemos adaptarnos a ella para ganar en competitividad.