Un complejo proceso de negociación colectiva está enfrentando minera Candelaria, controlada por la canadiense Lundin Mining. Mañana cesará sus labores el segundo sindicato de la compañía -Sindicato Mina- el que se unirá al Sindicato de Trabajadores de la cuprera, el que paralizó sus actividades el pasado 8 de octubre. Una de las medidas que tomó la compañía, ante las movilizaciones de los trabajadores, fue suspender, partir de mañana, sus operaciones por no contar con las medidas de seguridad necesarias para proteger a sus trabajadores e instalaciones. Pero, en los próximos días el conflicto puede continuar, pues la próxima semana comienza el proceso reglado de los dos sindicatos de supervisores, los que no descartan también iniciar una huelga legal. En total, serían unos 1.300 trabajadores propios los que podrían estar movilizados en la faena ubicada en la Región de Atacama.

Las posiciones están muy distantes, pese a que la compañía inicialmente ofreció un bono por Término de Conflicto (BTN) de $10,6 millones, el que luego subió en $400 mil. El que unido a un crédito blando de $2 millones y un bono por jornada excepcional, suman beneficios totales por $14 millones. La cifra es similar a la que minera Escondida pactó con el sindicato de supervisores hace unos días atrás -$15 millones-, en un conflicto que estuvo ad portas de terminar en una paralización.

La firma, además, propone un contrato a 24 meses como forma de responder a la incertidumbre que vive la industria. En el proceso del 2017, las partes pactaron un contrato colectivo cuya vigencia se extendía por 36 meses.

“Estimados socios y socias se informa que en la reunión sostenida hoy -19 de octubre 2020- con el mediador de la Dirección del Trabajo y la comisión negociadora de la compañía, la oferta que presentó la empresa es la misma que dio a conocer antes de hacer efectiva la huelga. Como directorio rechazamos categóricamente esta propuesta y le dejamos claro a la comisión que cuando tengan la verdadera intención de conversar y lograr un acuerdo, nos sentaremos”, señala el Sindicato Mina en un comunicado. El gremio, que lidera Patricio Gárate, destaca que pese a la petición de la minera de parar la movilización para volver a conversar, “no debemos dejar de movilizarlos, porque (la huelga) es la herramienta que tenemos para lograr nuestra reivindicación como trabajador. El llamado es a no bajar los brazos y seguir en esta lucha que tenemos que lograr nuestros objetivos”, indica el documento.

Uno de los puntos que los trabajadores no quieren tranzar es la mejora en el bono productivo, el que se calcula con una fórmula que considera un “full cost” (costo total de la producción) más precio del cobre, el que indican fuentes sindicales, les afecta en vez de ayudarlos. Uno de los puntos que les juega en contra, destacan las fuentes consultadas, es que la fórmula además considera la amortización y depreciación. “Lo vamos a pelear”, indica un dirigente sindical de la minera.

También están pidiendo reajustar por IPC ciertos beneficios, como los relacionados con la escolaridad, vivienda y salud. Según los datos recopilados, los trabajadores de la compañía reciben un sueldo promedio de $2,5 millones y tienen beneficios como bonos vacaciones y un bono de hasta $2 millones, por cada hijo, si es que está estudiando en la universidad. Además, cuentan con seguros escolares, salud y dentales y aguinaldos de Navidad y Fiestas Patrias.

Pero las relaciones laborales entre la administración, a cargo de Phil Brumit, y los trabajadores, no han sido buenas, comentan los trabajadores, los que incluso han iniciado procesos ante la Dirección del Trabajo por prácticas antisindicales. La relación se agudizó a partir de noviembre del año pasado, cuando la compañía comenzó a despedir trabajadores, lo que se une al plan de retiro que la firma lanzó en julio de este año, donde se acogieron más de 100 personas.

Como una medida de presión, el jueves pasado, los trabajadores enviaron una carta a la CEO de la compañía en Canadá, Marie Inkster, manifestando el actuar de los ejecutivos a cargo de las operaciones en Chile.

El conflicto preocupa al gobierno. Hoy el ministro de Minería, Baldo Prokurica, pidió “un esfuerzo especial para llegar a un buen acuerdo” entre la minera y sus trabajadores con la finalidad de evitar la huelga. “Chile está viviendo una realidad compleja, la minería es especialmente relevante para la Región de Atacama y para Chile, por eso hago esta solicitud, porque sé que están pasando por un momento difícil, y creo que es el momento de hacer un esfuerzo especial”, dijo el ministro de Minería.

Minera Candelaria produjo 111 mil toneladas de cobre durante 2019.