Mayor disponibilidad de espacio público en sus zonas urbanas, infraestructura de entretención y cultura, además de buen acceso a servicios básicos y ofertas de trabajo, son las claves de las ciudades que presentan los mejores índices de convivencia y calidad de vida a nivel mundial.

Según el Ranking Global de Calidad de Vida Mercer 2018, que considera distintos aspectos que influyen en la convivencia en las ciudades, Viena, Zúrich, Auckland, Múnich y Vancouver, son los núcleos urbanos que más se destacan en esta materia a nivel mundial.

En la versión de este año de la investigación, se incluyó a 231 de las principales ciudades del orbe, evaluando aspectos como transporte público, espacios comunes, seguridad, además de la presencia de infraestructura asociada a la cultura y entretención, entre otros.

Viena, ciudad austriaca ubicada a orillas del Danubio en Europa Central, se quedó con el primer lugar de la medición realizada por la consultora. Según el reporte, este núcleo urbano "ofrece a sus residentes y expatriados un alto nivel de seguridad, un transporte público bien estructurado y gran variedad de opciones culturales y de ocio".

Esta ciudad posee una población de 1,6 millones y una superficie de 414,65 km2, lo que le entrega una densidad de 4.547 habitantes por km2. Si bien este indicador no es de las más bajos del mundo, esta urbe posee una serie de beneficios y espacios dedicados al esparcimiento.

Por ejemplo, en 2001 la Unesco declaró el Centro histórico de Viena como "Patrimonio de la Humanidad", destacando sus cualidades arquitectónicas y de diseño urbano. Pero eso no es todo, el transporte de esta ciudad austriaca es de los mejores del orbe.

Para hacerse una idea, The Economist Intelligence Unit nombró a Viena como "la ciudad más habitable del mundo", siendo uno de sus aspectos más destacados la facilidad e infraestructura para la circulación peatonal y el acceso al complejo sistema de parques públicos. En tanto, la ciudad austriaca posee 29 líneas de tranvía --siendo la sexta más grande del mundo-, 127 recorridos de buses y cinco tramos de metro, entre otros.

Zúrich, principal ciudad de la Confederación Suiza, es otra de las urbes reconocidas en materia de convivencia y calidad de vida. De acuerdo a Mercer, este núcleo urbano también se destaca en materia de movilidad, acceso a servicios y trabajo, además por su seguridad y variedad de opciones culturales y de ocio.

Esta pequeña ciudad de Europa posee una población de poco más de 400 mil personas y una superficie de 88 km2, lo que le entrega una densidad de 4.730 habitantes por km2. Esta se destaca por su transporte y espacios de esparcimiento público. Además, existe una importante oferta de museos, galerías, teatros, orquestas sinfónicas y festivales.

Por ejemplo, uno de los festivales más importantes es el Sechseläuten o Festival de Primavera, el que cuenta con una serie de actividades que buscan integrar a los habitantes de esa ciudad. Además, también existe el Zürcher Festspiele, que se celebra en junio y julio, y cuenta con espectáculos de ballet, ópera, teatro y conciertos, entre otros.

En materia de transportes, Zúrich se destaca por la conectividad intermodal, donde conviven medios de movilidad mayor (buses y automóviles) con peatones y bicicletas, con un fuerte foco en la sustentabilidad urbana. Estrategia que nace desde el propio estímulo estatal y privado, como el realizado por la empresa Verkekrsverbund (ZVV) en la adaptabilidad de la movilidad.

Auckland es otra de las ciudades destacadas en materia de calidad de vida, pues mantiene una prolongada estrategia de incentivo a la convivencia en el espacio público, con una completa oferta de actividades culturales y sociales a lo largo del año. Además, cuenta con una destacada infraestructura de transportes y servicios.

Se trata de una ciudad de Nueva Zelandia situada en la Isla Norte, que tiene una población de 1,4 millones de habitantes y una densidad de 1.191 habitantes por km2.

Además se ser conocida como la tierra de El Señor de los Anillos, esta urbe se destaca por sus parques urbanos, como el Auckland Domain, y por su integración intermodal en el sistema de transportes, la que permite compatibilizar el traslado en bicicleta con otros medios mayores.