Las ventas al por menor de China cayeron en julio, defraudando las expectativas de un discreto aumento, ya que los consumidores de la segunda economía más grande del mundo no lograron desprenderse de la cautela sobre el coronavirus, mientras que otros datos mostraban las dificultades del sector industrial para recuperar el impulso.

Los mercados asiáticos retrocedían el viernes tras el decepcionante conjunto de indicadores económicos, los cuales suscitaban preocupación por la fragilidad con la que China estaba emergiendo de la pandemia de coronavirus.

La recuperación de China se había acelerado después de que la pandemia paralizara grandes sectores de la economía, a medida que una demanda contenida, los planes de estímulo del Gobierno y unas exportaciones sorprendentemente resistentes impulsaran la reactivación.

Sin embargo, los datos de la Oficina Nacional de Estadística del viernes mostraron un crecimiento de la producción industrial interanual más débil de lo esperado y las ventas al por menor extendieron su caída por séptimo mes consecutivo en julio. Esta tendencia se vio ligeramente compensada por una inversión inmobiliaria más consistente, que demostró que las ayudas públicas estaban apoyando la actividad de la construcción.