Un mal comienzo de año tuvo la industria vitivinícola nacional. El mundo pospandemia, con una economía ralentizada por la lucha contra la inflación, y los efectos en la cadena logística, parece no dar tregua al mercado del vino en Chile.
De hecho, el 2 de junio Vinos de Chile, gremio que reúne a más de 100 socios que representan el 78% del valor de las exportaciones, sostuvo que “durante el mes de abril se profundizó la caída en las exportaciones de vino embotellado”. Las bajas que se han registrado en estos cuatro primeros meses de 2023 resultan en una disminución acumulada del 20,5% en volumen y el 21,4% en valor, en comparación con el mismo lapso del año anterior, con 12,3 millones de cajas embarcadas y un retorno de US$357 millones.
En medio de este complejo escenario para los viñateros, el gremio -presidido desde inicios de este mes por Alfonso Undurraga, CEO de Viña Koyle- puso en marcha un plan para ampliar su mercado de exportaciones y conseguir un acuerdo tributario más beneficioso con India.
En esa línea, el 27 de abril Claudio Cilveti, Federico Mekis y Claudia Carbonell, gerente general, abogado y jefa de estudios de Vinos e Chile, respectivamente, acudieron al Ministerio de Relaciones Exteriores para reunirse con la subsecretaria de Relaciones Económicas Internacionales, Claudia Sanhueza. En el encuentro, consignado a través de la plataforma de Ley de Lobby, los representantes del gremio “destacaron los mercados de destino de mayor crecimiento para los vinos chilenos y los mercados de interés, en especial India”. El acta también consignó que “detallaron ciertos antecedentes y particularidades que resultan de relevancia para futuras negociaciones”.
Desde la Subrei indicaron que “India es un mercado que ofrece grandes oportunidades a los productos chilenos”. Explicaron que “Chile tiene un acuerdo comercial con India en vigencia desde el 2007, el cual fue ampliado en 2017. Sin embargo, entre los productos no negociados para su ingreso a la India bajo un tratamiento arancelario preferencial están los vinos embotellados”.
En la presentación de Vinos de Chile ante la Subrei -a la que tuvo acceso Pulso-, se destaca el potencial del mercado de India y por primera vez se dan a conocer cifras sobre el mercado que podría ayudar a levantar las alicaídas cifras del sector.
El documento señala que actualmente la presencia de vinos chilenos en India es marginal y sólo representa el 4,2%, en un mercado dominado por Australia, Francia e Italia.
A su vez, el consumo es de menos de un litro per cápita anual y el 88% corresponde a producción local. La importación de vino embotellado asciende a sólo US$10 millones.
“India representa un enorme potencial de mercado. Será la tercera economía al 2030. Hoy consumen 10 millones de persona con regularidad. 715 millones son mayores de 25 años y el 14% pertenece a la clase media. Las proyecciones de crecimiento de tasa rondan el 30% al 2027, en un mercado que llegaría a US$688 millones y 20 millones de consumidores nuevos anualmente”, dice la presentación del gremio viñatero.
Propuesta de negociación
En el mismo documento, el gremio sostuvo que en la actualidad el arancel para los envíos a India asciende al 150%, lo que más impuestos internos y provinciales puede llegar al 160% o más. Por lo mismo, planteó que Chile debe ampliar el acuerdo con India, pues viene a ser “clave para el crecimiento del sector”.
Así, el objetivo de Vinos de Chile es alcanzar una rebaja progresiva en un máximo de 10 años, de US$5 por botella.
Para ello, el documento incluye en uno de sus apartados la propuesta de negociación que debiera llevar adelante el gobierno en caso de acoger su planteamiento.
El inicio de la desgravación arancelaria considera dos vías. La primera se refiere a establecer una tasa base al momento de la firma del eventual acuerdo comercial con India. La segunda está ligada al concepto de “acoplarse” a la desgravación ya en curso que inició el gobierno indio con Australia. Ambas naciones esperan concluir sus negociaciones a finales de este año.
Al mismo tiempo, Vinos de Chile destacó la Cláusula Nación Más Favorecida, que considera rebaja de aranceles, precios y otra condición que podría ser abordada en la negociación.
Asimismo, plantea un plan de cooperación con un intercambio tecnológico y cuotas con tasa de crecimiento y cláusulas de salvaguardia.
Ventaja inicial
También en el escrito, el gremio destacó que “la ventaja inicial de los acuerdos comerciales se ha ido perdiendo”. Por otro lado, indicó, en el transcurso de los años otros países productores de vino han suscrito acuerdos con grandes mercados. Ejemplo de ello es el acuerdo entre Nueva Zelandia y Reino Unido.
Por lo mismo, el gremio pidió a la autoridad -según se consignó en la presentación- “nivelar la cancha” al ver que la industria vinífera nacional está quedando atrás competitivamente por los acuerdos comerciales de grandes potencias. La preocupación de los viñateros cobra mayor relevancia debido a que actualmente India negocia acuerdos comerciales con la Unión Europea, Reino Unido, Nueva Zelandia y otros.
En ese sentido, el documento realzó el “esfuerzo conjunto público-privado” del plan de cooperación entre Australia e India.
Asimismo, sostuvo que el precio promedio de vino embotellado de Chile se mantiene bajo en comparación con otras naciones productoras. Chile cuenta con un precio promedio de US$29,4 la caja, siendo superado por Alemania (US$30), Argentina (US$33), Portugal (US$34), Italia (US$41), Australia (US$45) y Nueva Zelandia (US$55).
En la reunión con la autoridad, los ejecutivos de Vinos de Chile aprovecharon la oportunidad para comentarle que están trabajando junto al Instituto de Estudios Internacionales de la Universidad de Chile. El objetivo es preparar un seminario con la participación de la Subrei para dar a conocer en detalle los alcances del estudio. “En ese marco, estamos proponiendo una estrategia público-privada”, sostuvo el gremio, en una escueta respuesta enviada a Pulso.