La discusión que abrió el fallo de la Corte Suprema que acoge la solicitud del Servicio de Impuestos Internos (SII) para alzar el secretario bancario de la empresa Uber Chile, está lejos de terminar.
Con esto, el SII podrá acceder a la contabilidad de la compañía y ver los flujos hacia su matriz en Holanda, así como el pago a los conductores que operan en Chile con la aplicación. Deberá entregar los saldos y movimientos realizados entre el 1 de enero de 2015 y el 30 de mayo de 2017 respecto de dos cuentas bancarias específicas mantenidas con el Banco de Chile, y otras en las que aparezca como titular o apoderado de otras sociedades, además de detallar todos los pagos efectuados a través de esas cuentas corrientes.
¿Precedente?
Aunque hay quienes estiman que esta sentencia no generaría un precedente o jurisprudencia, ya que se aplica solo en los términos en que fue consultado, no existe consenso al respecto. De hecho, para Rodrigo Benítez de BDO, la decisión de la Suprema marca un precedente, debido a "que es el primer fallo en relación al levantamiento de la reserva bancaria para fines tributarios". Sin embargo, advierte que la sentencia no se pronuncia sobre el uso de la información y la posibilidad de fiscalizar a los terceros vinculados a la aplicación.
"Los conductores y los usuarios son contribuyentes distintos a Uber Chile SpA y para su fiscalización el SII debiera dirigirse directamente a ellos", explica. Coincide con este análisis Álvaro Moraga, de Moraga y Cía, quien subraya que si el ente fiscalizador utiliza los antecedentes para cuestionar operaciones que no sean directamente de dicha empresa, "caería en una situación sin precedentes de abuso de la ley".
Esa, complementa Ignacio Gepp, de Puente Sur, es una de las grandes interrogantes de la decisión de la Suprema: "La singularidad de este fallo y el acceso a las cuentas de Uber es que podría permitirle perseguir las obligaciones tributarias de los conductores. ¿Ese era el objetivo del levantamiento de secreto bancario?", se pregunta.
Ahora bien, más allá del uso puntual de los datos, donde sí existe coincidencia es que a partir del fallo podría verse que "todo tipo de plataformas o empresas que intermedien pagos en Chile podrían estar sujetas al levantamiento del secreto bancario, de llegar a solicitarse judicialmente", afirma Marcelo Goldschmidt, de Goldschmidt y Cía, lo que da cuenta, a juicio de Andrés Vio, de EY, que las plataformas tecnológicas "constituyen una zona gris respecto del pago de los impuestos por las utilidades".
No obstante, Claudio Bustos, de Bustos Tax&Legal, recalca que "el alzamiento del secreto bancario es excepcional y extraordinario, reservado para casos en que sea imprescindible para verificar la veracidad de las declaraciones de impuestos y así ha sido usado por el SII".
En todo caso, para Uber el tema tributario en el mundo también ha sido un dolor de cabeza. Su más reciente batalla es en el Reino Unido, donde el regulador tiene abierta una investigación en su contra desde mayo.
Esto, porque la Corte de Apelaciones británica definió en 2018 que los choferes eran trabajadores de la compañía y no empleados independientes. Aunque el caso sigue en la Corte Suprema, este antecedente llevó a la HMRC (departamento de recaudación de impuestos)a cuestionar si Uber es proveedor de servicios de transporte, ya que, de ser así, los viajes estarían sujetos al cobro de un IVA de 20% retroactivo, por lo que expertos calculan que ya tendría una deuda de 1.000 millones de libras esterlinas (US$1.282 millones) con el Tesoro británico.