La economía de China exhibió signos tentativos de estabilización en octubre con un repunte de la inversión en infraestructura y la producción industrial, pese a que ventas minoristas débiles evidenciaron una fuerte presión a la baja sobre la producción.
La producción industrial creció 5,9%, más de lo esperado, en comparación con el mismo período un año antes, y la inversión en activos fijos avanzó 5,7% en los 10 meses hasta octubre, superando una estimación del 5,5%. Estos indicadores ponen en evidencia que el estímulo gubernamental destinado a impulsar la inversión en infraestructura finalmente está llegando a la economía real.
Al mismo tiempo, los consumidores mantienen un ánimo pesimista, con un mercado inmobiliario en baja que empeora las perspectivas. El crecimiento de las ventas minoristas de octubre se desaceleró a 8,6%, en comparación con una expansión de 9,2% un mes antes. Las ventas de viviendas nuevas crecieron al ritmo más lento en seis meses.
En definitiva, los datos dan cierto respiro a los funcionarios políticos que no saben bien cómo frenar una desaceleración que ha visto caer el crecimiento del cuarto trimestre hasta el nivel más flojo en casi un decenio. La medición más amplia de los datos de crédito informada el martes mostró una caída el mes pasado en un contexto de menores ventas de deuda pública, lo cual sugiere que podría haber más estímulo por delante.
"La economía de China continúa enfrentando severos vientos en contra", dijo Frederic Neumann, codirector de análisis sobre economía asiática de HSBC Holdings Plc en Hong Kong. "Se necesitará más estímulo en los próximos meses para prevenir una desaceleración más marcada del crecimiento global y para apuntalar el gasto de los hogares y la inversión privada en particular".
Los principales motores del repunte fueron la inversión en protección y limpieza ambiental y los proyectos de transporte vial, que se aceleraron visiblemente en octubre, dijo Liu Aihua, vocera de la Oficina Nacional de Estadística, en una reunión informativa en Pekín este miércoles. Se reanudó la construcción de algunos proyectos de infraestructura y se aceleraron otros importantes en el área de energía hidráulica, transporte y energía, lo que demostró que las políticas de apoyo están comenzando a surtir efecto, dijo.
La expansión de 3,7% de la inversión en infraestructura, en comparación con un 3,3% un mes antes, demostró que la recuperación continúa en un nivel bajo y que es necesario intensificar el apoyo mediante la política, el financiamiento y también la implementación, dijo Liu.
Los materiales básicos impulsaron la aceleración de la expansión de la producción industrial en octubre. La producción de cemento avanzó 13,1% interanual, lo que marcó el ritmo de crecimiento más alto desde marzo de 2016. La producción de productos de arrabio y acero registró los mayores aumentos en cinco años, mientras que la de carbón y coque también experimentó una marcada aceleración.
Por otro lado, no le fue tan bien a la producción de artículos orientados a la manufactura. La producción de máquinas herramientas para corte de metales se desplomó 9,8% interanual, la peor caída en casi tres años, en tanto la producción de circuitos integrados se desplomó 7,3%, con la peor medición registrada en más de cinco años de datos.
"Por fin el dinero del estímulo fiscal se gasta en infraestructura, lo cual empujó el crecimiento de la inversión en activos fijos", dijo Iris Panq, economista para la Gran China de ING Bank NV en Hong Kong. "La concentración de exportaciones al comienzo del período sostiene la manufactura, lo que explica un mayor crecimiento de la producción industrial".