El grupo de aerolíneas alemán Lufthansa ha aceptado el plan de rescate renegociado con la Comisión Europea (CE), que había impuesto estrictas condiciones al paquete, por el que el Estado alemán proporcionará 9.000 millones de euros a la compañía.
Fuentes de la aerolínea informaron de la decisión, que deberá ser sometida aún a su consejo de vigilancia, y que implicará transferir varios 'slots' -derechos de despegue y aterrizaje en determinadas franjas horarias- en los aeropuertos de Fráncfort y Múnich.
El plan de rescate acordado el pasado martes entre el Gobierno alemán y Lufthansa, tras una intensa negociación, había quedado en suspenso pendiente de una segunda ronda con Bruselas. El grupo de la aerolínea pospuso el miércoles la aprobación del plan, mientras representantes del Ejecutivo alemán y de la CE seguían sus conversaciones sobre el paquete.
El punto más controvertido era el referido a los "slots", ya que Luthansa consideraba que renunciar a esos derechos en Fráncfort y Múnich la debilita como eje de conexiones internacionales. Finalmente, según el comunicado emitido esta noche, el grupo, integrado por las aerolíneas Swiss, Austrian y Eurowings, acepta transferir hasta 24 "slots" de aterrizaje o despegue entre ambos aeropuertos. Esta opción se mantendrá al menos un año y medio, de acuerdo a ese texto.
El rescate pactado entre la aerolínea y Berlín prevé que Lufthansa recibirá 9.000 millones de euros (unos 9.800 millones de dólares) de ayudas públicas y que el Estado alemán entrará en su capital, aunque sin influir en las decisiones de la compañía.
El Estado alemán se convertirá así en el accionista mayoritario de Lufthansa, que hasta marzo sufrió una pérdida operativa antes de extraordinarios de 1.200 millones de euros (unos US$ 1.310 millones) debido a las restricciones a los viajes por el coronavirus. La participación directa en la compañía será del 20% y se hará mediante la suscripción de acciones en una ampliación de capital. Esta participación está por debajo de la minoría de bloqueo con la que el Gobierno podría vetar algunas decisiones de la compañía.
Además, el Estado alemán puede aumentar su participación en Lufthansa un 5%, hasta el 25% del capital más una acción, mediante la compra de deuda convertible en acciones ordinarias para proteger a la compañía en caso de una oferta de adquisición hostil.