Mal año para el retail: Ventas minoristas regionales cerraron el 2023 con retrocesos

Las ventas minoristas de las regiones de Valparaíso, Biobío y La Araucanía retrocedieron en diciembre, y terminaron el 2023 con caídas, según información entregada por la Cámara Nacional de Comercio (CNC).

En concreto, la CNC indicó que la caída registrada en las ventas minoristas en el último mes del año, fue menor a la registrada en noviembre.

“El año pasado fue difícil para el comercio minorista, marcando las ventas presenciales de las tres regiones resultados negativos desde mayo de 2022 y durante todo el 2023. Por su parte, al analizar los trimestres móviles de las tres regiones se reafirma un cambio de tendencia en los últimos períodos, tras la desaceleración sufrida, sobre todo, en la primera mitad del año pasado”, dijo la gerente de estudios de la CNC, Bernardita Silva.

En la Región de Valparaíso las ventas minoristas cayeron un 1,3% real anual en diciembre, y cerraron el año con una baja real de 8,9%. En términos de locales equivalentes, las ventas de la región marcaron una caída de 8,1% real anual en diciembre, acumulando entre enero y diciembre un descenso de 14,1%.

En la Región del Biobío, las ventas del retail tuvieron una caída de 2,2% real anual en diciembre, y con un retroceso real de 7,8% en el año. En término de locales equivalentes, el último mes del año marcó una baja de 5,7% real, cerrando el 2023 con una caída de 10,3% real, indicó la CNC.

Por último, en la Región de La Araucanía, las ventas minoristas tuvieron un retroceso real anual de 3% en diciembre, tras caer 8,4% en noviembre. Cayeron un 9,5% real en los doce meses de 2023. En términos de locales equivalentes se evidenció una baja de 5% real anual en el último mes del año, acumulando entre enero y diciembre una contracción de 9,6% real.

“Para el 2024 esperamos una lenta recuperación del sector. En enero ya se vio un repunte en el índice de actividad del comercio tras veinte meses negativos, pero el escenario aún es incierto y la reactivación del consumo privado depende en gran medida de que se reactive el mercado laboral, el cual aún no da señales positivas, junto con una inversión que tampoco logra repuntar. Entonces el gran desafío es recuperar el crecimiento a través de más y mejores inversiones, que creen empleo formal y de calidad”, explicó Silva.