No ha sido fácil la transición al modelo de cuatro partes que vive el país, y muestra de ello son los roces que surgieron entre Santander y Transbank, ya que el mes pasado el banco acusó a la red de adquirencia de "trabas inesperadas" para operar su nueva tarjeta de prepago Superdigital, ya que no está funcionando en todos los comercios.
Este conflicto se arrastra al menos desde febrero, según reveló una carta que envió a Transbank y Santander el mismo presidente del Banco Central, Mario Marcel, en marzo pasado. Pero ahora se suma un nuevo actor a la disputa: no sólo ha intervenido el ente rector en la pelea entre ambas entidades, ya que recientemente Mastercard le cursó una multa a la red de adquirencia por este tema.
En concreto, fue recién en los últimos 30 días cuando la marca de tarjetas decidió multar a Transbank con cerca de US$50.000, comentan fuentes conocedoras del proceso. La razón que estaría detrás de esta decisión, es que Mastercard estimó que la red de adquirencia no habría seguido la regla denominada Honor All Cards, un principio de aceptación universal y no discriminatorio de los medios de pago bajo la licencia de las marcas internacionales, el cual se traduce en que todas las tarjetas de marca Mastercard, sea cual sea el país de origen u emisor, pueden operar.
En relación a la penalización mencionada, fuentes de Transbank señalan que "fue apelada por la empresa, amparada en el estricto cumplimiento de la normativa nacional respecto de las tarjetas de prepago, por sobre las disposiciones de las marcas internacionales. Respetando la ley local estamos cuidando a los comercios".
Es por este motivo que aún no estaría zanjado del todo si se aplica la multa, pues ambas partes estarían discutiendo el tema. Justamente, Transbank a principios del mes pasado, cuando Santander acusó de "trabas" a la red de adquirencia, salió a argumentar que de acuerdo con la Ley de Bancos, a la normativa del Central y a la de la CMF, "se requiere del consentimiento explícito de los comercios para habilitarles el sistema. Esto implica que firmen un anexo de contrato para la aceptación del producto".
En ese momento, Transbank aseguró que "casi el 40% de los comercios aún no acepta expresamente operar tarjetas de prepago". En esa línea, la red de adquirencia estaría trabajando para que todos los comercios que así lo quieran, firmen este anexo de contrato para que pueda operar prepago.
Aunque la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) hasta ahora ha optado por guardar silencio, también está al tanto de la disputa. Y las firmas que ya anunciaron que lanzarán tarjeta de prepago, como las cajas de compensación, están siguiendo de cerca la pelea que les está abriendo el camino para operar este tipo de plásticos. De todas maneras, fue el mismo Marcel el que se refirió a este tema el 29 de marzo mediante una carta enviada al ex presidente de Transbank, Fernando Cañas.
Allí, el presidente del ente emisor reconoce que al Central no le corresponde resolver sobre las condiciones comerciales para que Transbank opere las transacciones efectuadas por la tarjeta de prepago de Santander. "Es una materia que corresponde negociar directamente a las partes, con sujeción al ordenamiento jurídico general y/o especial aplicable en la especie", dice la carta.
Pero más allá de pedirle a las partes que se pongan de acuerdo, el BC también se pronunció en esa ocasión sobre la discusión de la regla Honor All Cards que existía entre ambas empresas por la "supuesta incompatibilidad" con la normativa del ente emisor sobre operación de tarjetas de pago.
En el documento, el ente emisor hace un análisis en profundidad sobre el tema, y concluye que "no se aprecia la existencia de incompatibilidad alguna entre la normativa del BCCh y la regla Honor All Cards".
Es más, asegura que "la obligación de cumplir la referida regla de aceptación universal (...) regiría con independencia del modelo bajo el cual el operador preste sus servicios".