Todos los participantes en la reunión de política monetaria de la Reserva Federal del 3 al 4 de mayo apoyaron una subida de las tasas de interés de medio punto porcentual para combatir la inflación que, coincidieron, se había convertido en una amenaza para la economía y corría el riesgo de aumentar sin la intervención del banco central, según las minutas de la sesión.

La subida de tasas de 50 puntos básicos de este mes fue la primera de ese tamaño en más de 20 años y ha puesto a la Fed en el camino de un rápido endurecimiento monetario, con “la mayoría de las autoridades” juzgando que otras alzas de medio punto “probablemente sean apropiadas” en las reuniones de junio y julio, según las minutas, que se publicaron este miércoles.

“Todos los participantes coincidieron en que la economía de Estados Unidos era muy fuerte, el mercado laboral estaba extremadamente ajustado y la inflación era muy alta”, según las actas, con riesgos “al alza” de una inflación aún más rápida dados los actuales problemas de suministro global, la guerra de Ucrania y los continuos confinamientos por coronavirus en China.

En ese contexto, “los participantes estuvieron de acuerdo en que el Comité (Federal de Mercado Abierto) debería mover rápidamente la orientación de la política monetaria hacia una postura neutral (...) También señalaron que una postura restrictiva de la política puede llegar a ser apropiada”.

“Muchos participantes” juzgaron que subir las tasas ahora “dejaría al Comité en buena posición para evaluar los efectos de la firmeza de la política monetaria después durante el año”.

Las actas muestran a la Fed lidiando con la mejor manera de dirigir la economía hacia una menor inflación sin causar una recesión o empujar la tasa de desempleo sustancialmente más alta, una tarea que “varios participantes” en la reunión de este mes dijo que sería un reto en el entorno actual.

“Varias” autoridades de la Fed dijeron que los datos habían empezado a indicar que la inflación “podría dejar de empeorar”.

Pero incluso ellos estuvieron de acuerdo en que era “demasiado pronto para confiar en que la inflación había tocado techo”.