El timonel de la Sofofa, Bernardo Larraín Matte, hizo un sentido mea culpa por la colusión de CMPC -empresa controlada por la familia Matte- a pocos días del revés que sufrió la papelera en la Corte Suprema, donde les quitaron el beneficio de la delación compensada.
"Es un proceso que yo nunca lo he eludido. Son hechos gravísimos, me hacen sentir avergonzado y triste. Fui director y soy parte del grupo controlador. El fallo de la suprema hay que acatarlo más que comentarlo", dijo Larraín Matte en la cuenta anual de empresas inclusivas de Sofofa.
"Tanto la fiscalía como el TLDC por unanimidad había desacreditado el concepto de la coacción; bueno, pues bien, la Suprema no lo consideró así, por lo tanto lo que está hace es cambiar ese criterio y se ha generado un debate, a nivel técnico, interesante sobre este instrumento que es tan importante como lo es la delación compensada, si es que se debilita o fortalece, porque es muy importante", agregó.
Y no fue todo, porque dentro de su discurso en el centro de conferencias de la Sofofa, Larraín Matte pidió perdón por estos hechos que afectaron a los consumidores durante una década, y donde CMPC compensó a los usuarios afectados con un monto de $7.000 por persona.
Tras el fallo de la Corte Suprema la empresa deberá pagar US$15 millones.
En ese contexto, el dirigente de los empresarios industriales también abordó las críticas del expresidente de la Asociación de Bancos, Jorge Awad, quien derechamente pidió la renuncia de Larraín Matte, según informó Interferencia, a raíz de este caso.
"Los dirigentes gremiales estamos expuestos a críticas, y me parece muy sano que así sea, no tengo problema con esas críticas. Siento mucha confianza y apoyo en los consejeros y en las empresas sociedad SOFOFA, y comparten conmigo la visión de que estos casos dolorosos son fuentes de aprendizaje, pero al mismo tiempo, considero completamente legítima la expresión que hace públicamente una persona como Jorge Awad", sostuvo.
Código de Aguas
El titular de la Sofofa también abordó la polémica en torno al agua, luego que el Senado, tras un arduo y extenso debate, finalmente rechazara consagrarla como un bien de uso público en la Constitución.
En esa línea, explicó que el agua siempre ha sido considerada un bien de uso público en Chile y que el marco regulatorio permite al Estado de administrar ese recurso en caso de escasez.
""El agua es un bien nacional de uso público. Nunca lo ha dejado de ser, lo que ocurre es que se entrega en concesión a privados para que puedan desarrollar proyectos, y el Estado tiene las facultades para procurar que, si es que en una cuenca hay insuficiente disponibilidad de agua, se priorice el consumo humano", afirmó el dirigente.
Con todo, reconoció que es posible avanzar en una renovación al Código de Aguas: "me parece pertinente esa discusión".
Constitución y PSU
Pero Larraín Matte también expresó su opinión sobre el proceso constituyente, con una reflexión en torno a las condiciones de orden público para llevar adelante ese plebiscito, a propósito de las protestas que amenazaron a la PSU.
"El Acuerdo por la Nueva Constitución (…) era un Acuerdo por la Paz. Creo que no se han hecho los esfuerzos suficientes para, en el fondo, procurar un ambiente de paz social y orden público para desarrollar actividades como la PSU y un plebiscito. El contexto para que ese plebiscito se pueda hacer con libertad donde los actores puedan discernir libremente sin ser sometidos a una funa, obviamente que no se está dando hoy", expresó Bernardo Larraín.
En esa misma línea, el dirigente dijo que el gremio está trabajando con todos los expertos constitucionalistas para presentar una propuesta.
"Y cualquiera sea el resultado de este (trabajo) creemos que va a haber un planteamiento de reforma a la constitución o nueva constitución que amerita a que hoy, todas las instituciones que aspiramos e inciden en el debate público, estemos trabajando en los contenidos", agregó el empresario.
