Mediclic: la inteligencia artificial de la salud

Cecilia. Ese es el nombre de una asistente virtual que acaba de lanzar la startup Mediclic, la cual, basándose en inteligencia artificial, puede responder una serie de consultas médicas a través de un chat. Esta tecnología es uno de los tantos elementos de una empresa que surgió hace unos diez años en Estados Unidos, pero que se podría decir que “se nacionalizó” en Chile.

Fundada por los venezolanos e ingenieros industriales Daniel Silberman y Salomon Simkins, en 2013 ganaron un fondo de Start-Up Chile, siendo parte de una camada de decenas de startups que miraron en ese entonces a Chile para despegar. “Viviendo en Estados Unidos nos dimos cuenta del fuerte surgimiento de las tecnologías para salud digital y el potencial que tenía para América Latina, dado que en nuestra región el acceso a la salud es, muchas veces, más limitado. Y nos pusimos a trabajar desde Miami, desarrollando el software y probando en varios países”, comenta Silberman y agrega: “Pero nos dimos cuenta que tomaría más tiempo del que pensábamos y debíamos partir por enfocarnos en un mercado, que fue el chileno, debido a su rapidez de adopción”. Y así, centralizaron las operaciones desde Chile, con una serie de inversionistas ángeles que les dieron el empuje de US$600 mil para comenzar. Además, Silberman tiene familia en Chile.

Mediclic es una plataforma de telemedicina que ofrece una serie de servicios online, además de una experiencia de videoconsulta médica. Actualmente, cuenta con atención de más de 20 especialidades, incluidas veterinaria y terapia conductual para mascotas. La plataforma permite a las personas conectarse con un médico casi en tiempo real, con una espera promedio para ser atendido -según indican- de menos de cinco minutos. La atención más utilizada es la de medicina general inmediata, que está disponible las 24 horas del día, los 365 días del año. Su servicio lo ofrecen a personas naturales, pero también a empresas para sus colaboradores.

Silberman explica la tecnología de forma sencilla: “Damos la posibilidad de ir al médico sin tener que ir. Eso es el punto de partida a muchas de las cosas que se pueden hacer en las interacciones relacionadas a la salud. Es decir, atenderte con el médico general o un especialista, enviar recetas, ver el historial médico, realizar exámenes, enviar notificaciones, etc. Todo a través de tu celular u otro dispositivo y en un ambiente clínico especialmente desarrollado para ello”, dice.

De hecho, fue la primera tecnología de este tipo en ser aprobada y certificada por Fonasa para su cobertura. También permite reembolsos con isapres. Sus médicos pueden entregar documentos como recetas médicas, órdenes de exámenes, certificados médicos, licencias médicas, entre otros documentos. “Desde temprano logramos trabajar con las isapres. Si bien muchas de ellas siguen siendo nuestros clientes, hoy nuestros servicios se han ampliado y hay empresas que nos contratan directamente como aseguradoras de salud, municipalidades, laboratorios, farmacias y centros de salud”, explica el CEO de esta startup, que posee desarrolladores informáticos repartidos entre Chile, Estados Unidos, España, Venezuela y Colombia.

Claramente, el periodo de la pandemia fue un empujón clave, ya que permitió la masificación de las teleconsultas, además de transformarse en una práctica más validada por las personas. “Digamos que aumentamos en 30 veces el volumen de atención que teníamos los meses previos a la pandemia. Fueron pruebas bien fuertes al diseño de nuestra plataforma y capacidad de escalar. Y a pesar de algunos sobresaltos, no quedamos mal con nadie”, asegura Daniel Silberman.

En mayo pasado tuvieron su mes récord de atenciones médicas llegando a 20 mil, con una puntuación de 4,9, de un máximo de 5, en las tiendas de Google Play y App Store (Apple). El modelo de negocios está basado en un pago por el uso de la plataforma a las empresas o entidades del área de salud (o servicios relacionados como los seguros), que varía según la cantidad de servicios y el número de usuarios que accede a la plataforma, la cual puede personalizarse según los requerimientos de los clientes. Según Silberman, el costo por usuario es cerca de un 30% menos que lo presupuestado con una metodología presencial o más tradicional. En Chile ya tienen 50 empresas u otro tipo de entidades como clientes. Mientras que en México la cifra alcanza a 7 clientes. En 2020 lograron el break even.

Si bien tienen operaciones en Chile y en el país azteca, ya están prospectando entrar a otros países de América Latina, comenzando con Colombia y Brasil en el segundo semestre de 2023, para así cumplir con el objetivo de ser más regionales y para ello, evalúan un próximo levantamiento de capital.

“Creemos que la utilización y penetración de estas plataformas aún tiene mucho por crecer. Viene una cantidad de servicios nuevos que te van a permitir hacer un mucho mejor uso de los recursos de salud. Y Cecilia es un excelente ejemplo de eso, porque con esta plataforma de inteligencia artificial, las personas pueden aprender a prevenir y educarse en salud, sin los riesgos de autodiagnosticarse”, explica el CEO de Mediclic, mientras muestra en la práctica cómo funciona el algoritmo de Cecilia, quien contesta a través de un chat a la pregunta: “Tengo una migraña muy fuerte y nunca me había pasado antes. ¿Qué puedo hacer?”.