La encuesta Cadem evalúa a distintas instituciones públicas. Congreso, policías, entre otras. Los gremios empresariales forman parte de este listado, entidades que han mostrado un fuerte repunte de la aprobación ciudadana en el último tiempo.

De acuerdo a la base de datos de la medición, los gremios empresariales tenían un piso de 28% de aprobación en noviembre de 2015, una de las más bajas del listado, en pleno destape de la colusión del papel higiénico denunciado por la Fiscalía Nacional Económica. En ese año también se conocía el financiamiento ilegal de la política realizada SQM. Estos hechos, sin duda impactaron en la imagen empresarial.

Sin embargo, desde enero de este año comenzó una trayectoria alcista que ha llevado a su evaluación favorable en torno al 50%, en la medición de hace algunas semanas realizadas por Cadem.

Esta noticia es rescatable. Habla de un sector empresarial que está buscando la mejor alternativa para lograr una mayor valoración sin dejar de lado sus solicitudes, con capacidad de adaptación. No han caído en ideas populistas, sino que ha sido una renovación de formas de llegar a la ciudadanía. De explicar sus principios. Los nuevos liderazgos más visibles actualmente son Alfonso Swett y Bernardo Larraín, de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) y de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), y han logrado de alguna manera cambiar la forma de comunicar sus demandas, sin dejar de visibilizar sus posturas. Por ejemplo, que las utilidades son legítimas. Una de las destacadas, del último tiempo, es cómo han pedido disminuir la tasa de impuesto corporativo al Gobierno una vez que el Presidente Piñera notificó que no cumpliría con su programa en esa materia. Incluso han dado ideas para dar viabilidad a recorte, como ligarla al desempeño fiscal.

Más allá de los buenos números, los importante es que lo líderes de los distintos gremios empresariales busquen dar continuidad, una institucionalidad a su legado, y que el personaje no termine siendo superior a la institución. Esa también debe ser una tarea de las actuales dirigencias.