Luego que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) anotara un alza de 1,2% en mayo, llevando la medición en doce meses a 11,5%, su mayor nivel desde mediados de 1994, las apuestas del mercado apuntan a que la inflación seguirá con registros elevados, lo que llevaría al Banco Central a mantener las altas tasas de interés por un periodo más extenso.

De acuerdo a la Encuesta de Operadores Financieros, dada a conocer este martes por el instituto emisor, la inflación registraría un aumento de 1% tanto en junio como en julio.

En el sondeo anterior las estimaciones eran de incrementos de 0,8% y 0,9%, respectivamente. En agosto, en tanto, el IPC subiría 0,8%.

Según la encuesta, en un horizonte a 12 meses, el registro anual llegaría a 7%, mientras que en 24 meses se ubicaría en 4,5%.

El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) dará a conocer el dato de inflación de junio el 8 de julio.

En este escenario, según los operadores, el instituto emisor seguiría subiendo la Tasa de Política Monetaria (TPM) para combatir la alta inflación.

Así, la TPM llegaría a 9,5% en julio desde el actual 9%, tal como se estimaba en la encuesta anterior, pero se mantendría en ese nivel al menos hasta enero de 2023. Ese es un periodo más prolongado de altas tasas de interés, ya que en el sondeo previo se estimaba que la TPM bajaría a 9,25% en diciembre.

En su última Reunión de Política Monetaria realizada el 7 de junio, el Banco Central aumentó la TPM en 75 puntos, dejándola en 9%, su mayor nivel en la era nominal, es decir, desde 2001. Pero las minutas del encuentro mostraron que el instituto emisor consideró incluso la opción de aplicar un incremento de 100 puntos.

De acuerdo a la encuesta, la tasa de interés bajaría a 7,5% en julio de 2023 y llegaría a 5,5% en julio de 2024.

Respecto al tipo de cambio, lo operadores estiman que se ubicará en $900 tanto en un horizonte de siete días como en un plazo de 28 días.

En una semana marcada por una fuerte racha alcista, el precio del dólar alcanzó un nuevo máximo histórico el viernes y tuvo su mayor aumento semanal desde inicios de 2009.

Sin embargo, la moneda reaccionó a la baja este martes, luego que el gobierno anunciara la venta de hasta US$5.000 millones de exceso de liquidez en moneda extranjera y el Banco Central diera a conocer que suscribió un acuerdo de liquidez con el Banco de Pagos Internacionales.

Así, el dólar terminó las operaciones bajando $5,41, a $912,91 frente al récord de $918,32 en que cerró el viernes.