El ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, declinó referirse a la queja que presentará el sindicato 1 de Maersk y la CUT ante el Comité Asesor Sindical (TUAC en su sigla en inglés) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), por graves incumplimiento de parte de la empresa a las directrices que el organismo establece para la reestructuración y/o cierre de empresas multinacionales y señaló que el gobierno seguirá ayudando a los trabajadores en la búsqueda de nuevos trabajos tras el cierre de la planta de contenedores refrigerados ubicada en San Antonio.

"Más que inmiscuirnos en las decisiones de los trabajadores respecto a las acciones a seguir nosotros queremos ser parte de la solución acompañando a los trabajadores en su búsqueda de nuevo empleo, que es lo más importante", señaló.

En este sentido indicó que el sábado se realizará una reunión con representantes del gobierno y los trabajadores así como el alcalde de San Antonio para buscar oportunidades de empleo para los trabajadores despedidos, y que ese mismo día se iniciarán cursos de capacitación para ex empleadas de la planta.

"Nosotros como gobierno estamos absolutamente comprometidos con proteger, en primer lugar, todos los derechos de los trabajadores, por lo mismo la Dirección del Trabajo, lo que ha estado hoy día es atenta a que todos los derechos de los trabajadores se respeten en su respectivos finiquitos".

Asimismo indicó que "hoy lo que está ocurriendo es producto de malas políticas públicas, porque se frenó la inversión y se hizo una reforma laboral, muchas empresas están pagando las consecuencias y eso hay que corregirlo"

Para la presentación de la queja los trabajadores recurrirán hoy a Cancillería, específicamente a la Dirección General de Relaciones Económicas e Internacionales (Direcon), donde se encuentra el Punto Nacional de Contacto (PNC), estructura establecidas por los gobierno pertenecientes a la OCDE para mejorar la efectividad de las directrices y la recepción de quejas.