Una gira por Japón, Corea del Sur y China es la que por estos días está realizando el ministro de Economía, Nicolás Grau. El objetivo de este viaje es, según detalla el secretario de Estado, “para mostrar la agenda de gobierno y oportunidades de inversión que impulsamos para un desarrollo productivo y crecimiento sostenible”. Esto, principalmente en lo relacionado con el litio y el hidrógeno verde.


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Pero junto con detallar aspectos de su viaje, aborda uno de las materias más esperadas por el sector empresarial: el proyecto contra la permisología que se sigue afinado al interior del gobierno y, relacionado con lo mismo, las diferencias que existirían al interior del Ejecutivo entre quienes buscan hacer más fluido todo el proceso de inversiones para impulsar el crecimiento de la economía, y quienes anteponen a ello el cuidado del medioambiente. Al respecto, el secretario de Estado desestima que existan esas “dos almas”.

El gobierno viene anunciando hace varios meses que está trabajando en un proyecto para agilizar o reducir la permisologia, ¿por qué se ha demorado tanto, considerando la importancia que tiene para el sector empresarial?

-Estamos trabajando desde enero en este proyecto. Ya teníamos un comité asesor que nos permitió definir ciertos elementos estratégicos y juntar antecedentes desde mediados de 2022. Nuestro compromiso es presentarlo durante este año legislativo y vamos a cumplirlo. Ahora, tiene dos dificultades. La primera es que es un proyecto que involucra a más de 40 servicios y que en total entregan 380 permisos. Por ello, como Ministerio de Economía hemos realizado una serie de reuniones con todos estos ministerios y servicios para ir coordinando y trabajando el diseño con ellos. El diseño general requiere un conjunto de definiciones que debe involucrar a todos estos actores. Ese proceso de trabajo interno nos tomó varios meses, pero ya estamos terminando. Lo segundo, es que este proyecto de ley involucra muchas otras leyes y muchos otros reglamentos, porque involucra diversos servicios, y por ello la escritura del proyecto es compleja también. Ahora estamos en esta etapa.

Pero usted ya ha ido adelantando los lineamientos generales del proyecto en el mundo privado.

-Lo que vamos a hacer es definir distintos caminos para esos permisos. Por ejemplo, en algunos casos esos caminos, dependiendo del riesgo del proyecto, implicará que se requiera el permiso propiamente tal, y en otros casos, donde el riesgo sea más bajo, se permitirá que existan declaraciones juradas, que serán en menos tiempo. Las exigencias no se cambiarán, sino que, dependiendo del riesgo, algunos permisos serán cambiados por declaraciones juradas y eso será más rápido. A su vez, los servicios tendrán, en la práctica, más tiempo para realizar la evaluación y entregar los permisos correspondientes en un menor tiempo.

En algún momento se habló de una disminución del número total de permisos, ¿eso ya no será así?

-Las exigencias no se cambiarán, sino que lo que cambiará es que dependiendo del riesgo del proyecto, algunos de estos permisos podrían ser cambiados por declaraciones juradas.

Ministro Grau y las “dos almas” del gobierno por crecimiento económico.

¿Estos permisos se cruzan con el proyecto que lidera la ministra de Medioambiente y las distintas miradas que hay en el gobierno sobre cómo impulsar el desarrollo del país?

-No, el gobierno tiene una sola mirada respecto a los permisos y esa es del Presidente de la República. Ella tiene dos elementos fundamentales: primero, que los permisos deben cumplir su rol. En el caso de los ambientales proteger el medioambiente, y en el caso de los permisos sectoriales, evitar ciertos riesgos. Lo importante es que los diseños de estos permisos de inversión salvaguarden bien estos dos intereses.

Sin embargo, desde afuera se ve que al interior del Ejecutivo hay “dos almas” relativas a la importancia del crecimiento económico y a la protección del medioambiente, donde unos ponen el crecimiento primero y otros el medioambiente antes que el desarrollo. ¿Cuánto hay de eso?

-Eso lo he leído en la prensa, pero no lo he visto en la práctica en el gobierno. Tenemos una visión común. El medioambiente no es una traba para el desarrollo, sino que parte de nuestra visión del desarrollo. Es una condición para el desarrollo. Estamos convencidos que, en el caso del medioambiente, uno puede hacer que la tramitación de proyectos sea más eficiente en tiempos breves, pero fortaleciendo su protección.

En cuanto a la gira por Asia, ¿hay metas concretas en cuanto a resultados?

-Esta es una gira que busca promover la inversión extranjera, con foco en las agendas prioritarias que estamos impulsando y que implican los proyectos más atractivos de inversión como litio, hidrógeno verde, también infraestructura digital y algo de minería del cobre.

Ministro Grau y las “dos almas” del gobierno por crecimiento económico.

¿Cómo han ido estas reuniones?

-Hemos realizado presentaciones a un grupo grande de empresas, de un tema en específico. En Tokio, Japón, tuvimos una presentación en empresas interesadas en litio. Había unas 15 empresas, ya sea que están interesadas en la extracción de litio o en acceder al litio como insumo. Después tenemos otro tipo de reuniones que son bilaterales, que son más largas y más específicas. De ese tipo tuvimos unas cinco en Tokio. También hubo reuniones con bancos de inversión. Juntando todas estas actividades, han sido unas 25 a 30 empresas en Tokio.

En estas citas, ¿ha habido algún cuestionamiento o dudas sobre la estrategia de Chile respecto del litio, en relación a la propiedad, por ejemplo?

-Lo que diría es que hasta ahora las empresas en Japón tienen un conocimiento general de nuestra estrategia, por lo tanto, quieren saber todas las dimensiones del modelo de negocios.

¿Pero no genera debate?

-Quieren entender, y esto no sólo pasa en Asia, sino que en otros lugares donde hemos estado haciendo estas presentaciones. Quieren entender cómo funciona el modelo de negocios y buscan tener certeza de cómo ese modelo de negocios se irá implementando. La fórmula o el modelo de participación pública-privada mantiene el mismo diseño que planteó el Presidente. Esto es, que en los salares que son considerados estratégicos se requiere una participación del Estado sobre el 50%. En cambio, en los que no sean estratégicos, se va a proponer una mayor flexibilidad. Será el Comité de Ministros del Litio y Salares el que lo defina. Lo importante es que los inversionistas tomen sus decisiones de inversión y participen en estos modelos de negocio público-privado.