Durante la tarde, el Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, detalló ante la Comisión de Trabajo de la Cámara de Diputados el impacto fiscal que tendrá la reforma de pensiones que busca llevar adelante el gobierno.

En esta línea, Larraín precisó que considerando la totalidad del proyecto, que incluye cambios al sistema de pensiones solidarias, aportes a la clase media y al subsidio de dependencia, entre otros, llegará a un gasto que representará el 0,89% del PIB, esto una vez que las modificaciones entren totalmente en régimen.

Dentro de este costo, uno de los más significativos es el aporte al Pilar Solidario, que se proyecta parta representando el 0,03% del PIB en el año 2020, para llegar a un máximo de 0,32% del PIB entre 2023 y 2049, y se estabilice en 0,31% hacia 2050.

Financiamiento

Respecto del financiamiento, el Ministro enfatizó que "tenemos holguras fiscales suficientes para financiar responsablemente la reforma de pensiones". Además, recordó que la reforma previsional del año 2008 también consideró un financiamiento a través de las holguras fiscales.

Según Larraín, hacia el largo plazo los mayores gastos asociados a la reforma serían compensados, lo que se reflejaría en la mantención de la relación del gasto fiscal con el PIB.

Al cierre de su exposición frente a la comisión, Larraín explicó que las proyecciones del Gobierno son conservadoras y que casi todos los proyectos, cerca de un 95%, se financian con holguras fiscales.

"Bajo el predicamento de que una reforma de pensiones se debe financiar con una reforma tributaria nunca hubiésemos aprobado la reforma de 2008", dijo el Ministro.