"Seguir produciendo textiles en Chile parece ser una locura pero nosotros estamos contra corriente", dice el gerente comercial de Monarch, Alejandro Magnasco sobre los nuevos pasos de la compañía: levantar una nueva planta de trama, para la fabricación de pantys y camisetas femeninas.
La infraestructura se levantará en su terreno de Matahon, e implicará una inversión de US$ 8 millones, en lo que define como un complejo de última generación, en términos productivos y de sustentabilidad.
La nueva planta empleará entre 100 y 120 personas y se espera que esté operativa aproximadamente en febrero de 2020.
Junto con este proyecto, Monarch también trabaja en la ampliación de entre 10% y 15% de su actual planta, además de la traer nueva maquinaria para la fabricación de calcetines, lo que aumentará también entre un 10% y 15% la capacidad productiva "para enfrentar la alta demanda que hemos tenido en los últimos semestres", comenta Magnasco, quien además afirma que la clave del crecimiento está precisamente en la incorporación de tecnología, y en que no han sacrificado calidad.