La calificadora de riesgos Moody's dijo este jueves que una economía débil y políticas públicas inciertas en Argentina aumentarán los riesgos crediticios de emisores corporativos al menos hasta mediados de 2020.

La alta inflación, en torno al 50% anual, y las dudas políticas de cara a las elecciones presidenciales, son dos grandes condicionantes para los negocios.

"La cobertura de la deuda corporativa y la liquidez probablemente sufrirán un deterioro en 2019 frente a una inflación persistentemente alta y mayores costos de financiamiento", sostuvo la empresa en un reporte.

Agregó que "la recuperación económica transitoria de Argentina hasta 2020 beneficiará moderadamente el crecimiento y los márgenes de las empresas de la industria de consumo, aunque este sector sigue siendo muy vulnerable a posibles choques cambiarios".

La coalición política liderada por el presidente Mauricio Macri se enfrentará en octubre al binomio peronista de Alberto Fernández y la expresidenta Cristina Fernández -candidata a vicepresidenta en la fórmula-, en una elección que distintos analistas señalan que será pareja.

Los argentinos acudirán este domingo a elecciones primarias para ratificar a los candidatos de las elecciones generales que se celebrarán en dos meses. "La posible recuperación económica gradual de Argentina hasta 2020 favorecerá moderadamente el crecimiento de los ingresos y los márgenes de las empresas de consumo", afirmó Martina Gallardo-Barreyro, representante de Moody's en un comunicado.

"Sin embargo, el sector de los bienes de consumo sigue siendo vulnerable a choques cambiarios que pueden destruir instantáneamente el poder adquisitivo y la demanda", sostuvo la analista.

Para Moody's, la proyección de una producción casi récord de la cosecha implica mejorar el crecimiento y la rentabilidad del sector agropecuario, pero los esfuerzos de consolidación fiscal del gobierno aumentan la vulnerabilidad del sector frente a cambios repentinos en la política fiscal.

El peso de Argentina perdió un 50% en 2018 y arrastra una caída de casi otro 17% en el transcurso de 2019. La incertidumbre política imperante hace que el riesgo país medido por la banca JP.Morgan promedie los 900 puntos básicos, zona máximo en ocho semanas.