La analista principal de clasificación del gobierno de Chile de Moody's, Ariane Ortiz, refutó las declaraciones del ministro de Hacienda, Felipe Larraín y el Presidente Sebastián Piñera, quienes la semana pasada atribuyeron la baja en la calificación que le aplicó la agencia al país al manejo fiscal del gobierno de Michelle Bachelet y afirmó que el deterioro en las cuentas fiscales se inició durante el primer periodo del Mandatario.

"El deterioro lo empezamos a observar desde 2010 y fue gradual, pero constante y persistente", dijo e Ortiz en una entrevista con El Mercurio Inversiones.

"Ahí están los números", añadió. Asimismo indicó que parte de las razones por las que la agencia no aplicó el recorte en 2017, como lo hicieron sus pares de Standard & Poor´s  y Fitch, fue "porque queríamos ver cuánto podían cambiar las perspectivas tanto económicas como fiscales con la entrada del nuevo gobierno y entonces tomar una decisión. 

La semana pasada Moody's bajó la calificación de deuda de Chile desde Aa3 a A1, cambiando la perspectiva desde negativa a estable.

De esta forma el organismo siguió los mismos pasos que sus pares que hace un año redujeron las notas de nuestro país. En julio Standard & Poor´s descendió en un peldaño el rating de Chile de "AA-" a "A+" con perspectiva estable; y un mes después Fitch recortó desde "A+" a "A" con perspectiva estable.

Las razones de Moody's son semejantes a las argumentadas por las otras clasificadoras, es decir el aumento del nivel de deuda y el menor crecimiento que impiden una mejoría sustantiva en estos indicadores.