Cuando hay crisis económicas, los niveles de morosidad tienden a subir por la menor capacidad de pago de los hogares. Sin embargo, en esta ocasión ha ocurrido todo lo contrario: la morosidad de la banca mayor a 90 días está en mínimos desde que hay registros comparables (2011), lo que se explicaría principalmente por el retiro del 10%.
De hecho, cuando iniciaron los pagos por de las AFP en agosto, ese mismo mes ya las cifras mostraban la baja mensual más importante de la morosidad mayor a 90 días desde que hay registros comparables, donde el retroceso más grande lo registró la mora de consumo. Pero en septiembre el indicador siguió bajando, y tocó su mínimo en al menos nueve años.
Según las cifras que reportó este miércoles la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), la morosidad en el total llegó a 1,75%, su menor nivel. Esto se explica porque ese mismo récord registró la mora en la cartera de consumo y de vivienda. En el caso de la primera, la mora llegó a 1,87%, ya que bajó 37 puntos base (pb) en comparación a agosto. En la cartera hipotecaria, en tanto, la mora mayor a 90 días terminó en 1,77% tras registrar una baja de 15 pb respecto al mes anterior.
Eso sí, según reportó la Asociación de Bancos (Abif) en un informe, los castigos muestran distintas dinámicas, ya que mientras en la cartera hipotecaria los castigos se mantienen constantes en 0,13% de las colocaciones; “en el segmento de consumo el índice de castigos continúa su tendencia alcista, registrando 7,83% de las colocaciones en septiembre, cifra 14 pb mayor a la observada en agosto”.
Por otro lado, cuando se trata de la cartera comercial, la morosidad se mantuvo relativamente estable, llegando a 1,73% de las colocaciones en septiembre, lo que significa una baja de 2 pb respecto al mes anterior. Asimismo, los castigos de las colocaciones comerciales disminuyeron su indicador, alcanzando el 0,54% de las colocaciones.
Así, la cartera comercial es la única que no está en mínimos desde que hay registros.
Al ver el crecimiento del crédito, la Abif reportó que “las colocaciones continúan con un dinamismo bastante por sobre el crecimiento de la economía. En un contexto en que la economía cae 5,6% en promedio los últimos 12 meses, el crédito crece 4,8%”.
En ese sentido, el documento detalla que destacan las colocaciones comerciales e hipotecarias con un ritmo de expansión de 9,3% y 6,1%, respectivamente. “En contraste, y en línea con la dinámica del mercado laboral, las colocaciones de consumo exhiben una contracción de aproximadamente 15% anual”, advierte.