La inversión en carreteras y medios de transporte públicos es una de las joyas de la capital chilena, según el estudio City Mobility Index de Deloitte a partir de su edición de este 2019, aspecto en donde alcanzó la máxima calificación del índice (ver infografía).
Sin embargo, en la otra cara de la moneda, la calidad del aire reprueba de forma rotunda al tener la categoría más baja de la medición.
El documento busca ir mostrando como las urbes van o no avanzando hacia el objetivo de lograr una movilidad urbana inteligente. Es una especie de foto anual para comparar la movilidad de Santiago con las principales ciudades del mundo.
Hilando más fino, otra de las preocupaciones que plantea el sondeo, en el que participa Chile por primera vez, es que ante al aumento de la presencia de automóviles, micros, bicicletas, taxis y patines eléctricos en las calles no se han tomado medidas que hagan frente a los nuevos fenómenos de apps de transporte o delivery. Según cifras del estudio, en el modo de traslado segregado en la capital los peatones representan el 34%, transporte público (29%), automóvil (28%), bicicletas (4%) y otros (5%).
Ante este escenario, el director de sustentabilidad de Deloitte, David Falcón, plantea como una solución "acortar el espacio de los autos particulares en función de otros medios de transporte más amigable con el medio ambiente".
Mientras que para hacer frente al problema de la contaminación, Falcón ve en la electromovilidad una solución a este problema, siempre y cuando existan incentivos para que tanto el sector privado como público, opten por dejar el auto a combustión de lado.
Uno de los objetivos de que el país participe en el sondeo, que contempla a 56 ciudades alrededor del mundo, es que no tan solo sea un modo de comparación, sino que una oportunidad para que el gobierno vea qué han hecho sus pares para superar las principales dificultades que tiene hoy Santiago en materia de movilidad.
De las urbes de la región que también son parte de la medición se encuentra Bogotá, Buenos Aires y Sao Paulo.
La congestión también fue un punto negro a la hora de la evaluación tras ver que el alto tráfico, ya no solo se ve en las horas peak, sino que también a mediodía.
Una de las formas con que otras ciudades han enfrentado esto ha sido el uso de incentivos y desicentivos para que las personas opten por dejar el auto en la casa.
Por ejemplo, Londres realiza un cobro a todas las personas que circulen en autos por las calles del centro.
Otro de los llamados de atención fue a la falta de accesos amigables con al transporte público para las personas discapacitadas.
La metodología del estudio, que busca dar una mirada de los desafíos de la movilidad a largo plazo, se levantó por datos de acceso publico de instituciones como Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones, fiscalizadores deTransantiago y el Directorio de Transporte Público Metropolitano (DTPM).
Estas cifras se complementan con el aporte del mundo privado relacionada al transporte como Waze y Uber que han facilitado sus base de datos a Deloitte para tener una imagen aún más clara de lo que ocurre en Santiago en tema del transporte.
Además, esta alianza contempla la inclusión de actores del mundo de la energía para acelerar el proceso de masificación de la electromovilidad.
Trabajo con el gobierno
El Ejecutivo, por medio de la ministra de Transporte, Gloria Hutt, se comprometió a tener una relación de trabajo estable con esta medición y también validó los datos utilizados en el estudio.
Mientras que sobre la forma de hacer frente a las problemáticas que reveló el sondeo, la secretaria de Estado planteó que como gobierno " deben promover la implementación de sistemas de transporte mucho más eficientes y sustentables, como RED y herramientas tecnológicas que permitan resolver necesidades de información que mejoren la experiencia de viaje", comentó.
Deloitte al ser consultado por qué se debería priorizar o destacar esta medición por sobre otros trabajos, comentó que "estos no tienen esta mirada a largo plazo y la nuestra también tiene la ventaja de comparar a Santiago con las mejores ciudades del mundo con un criterio único", comentó el director de sustentabilidad de Deloitte.