El multimillonario inversionista en minería Robert Friedland tiene un mensaje para la industria minera chilena: cuidado con el Congo.
El proyecto Kamoa-Kakula de Ivanhoe Mines en la República Democrática del Congo, actualmente en desarrollo, podría con el tiempo disputar a la chilena Escondida la condición de ser la mina de cobre más grande del mundo, comentó Friedland, copresidente ejecutivo de la compañía, durante la conferencia Cesco Week en Santiago.
"Vamos a pisar los talones a Escondida para ver quién será el mayor productor de cobre en el mundo", aseguró. La mina apunta a producir 700.000 toneladas por año, lo que la convertiría en la segunda más grande, pero "no hay razón por la cual no se pueda duplicar", señaló Friedland.
En contraste con buena parte del sector cuprífero chileno, que opera a gran altura en la cordillera de los Andes, no hay "hielo ni nieve" en el país africano, recordó.
"Chile tiene competencia de Mongolia y del Congo, así que bienvenidos al futuro, ha llegado".