Algunos de los individuos más ricos de Estados Unidos han hecho un llamamiento para que se introduzca un impuesto federal a la riqueza.

El financiero George Soros, las herederas Regan Pritzker y Abigail Disney y el cofundador de Facebook Inc., Chris Hughes, son algunos de los que abogan a favor del gravamen para ayudar a abordar la desigualdad de ingresos y proporcionar fondos para abordar el cambio climático y los problemas de salud pública.

"Escribimos para pedir a todos los candidatos a la presidencia, ya sean republicanos o demócratas, que apoyen un impuesto moderado a la riqueza sobre la fortuna de la décima parte más rica del 1% más rico de los estadounidenses, sobre nosotros", según una carta firmada por 19 personas, una de ellas anónima, y publicada en internet el lunes.

"El próximo dólar de los nuevos ingresos fiscales debe provenir de los estadounidenses más afortunados económicamente, no de los estadounidenses de ingresos medios y bajos".

Abanderados apoyan idea

Los candidatos presidenciales demócratas Elizabeth Warren, Pete Buttigieg y Beto O'Rourke apoyan la idea, de acuerdo con la misiva. La propuesta de Warren aboga por un impuesto del 2% sobre los activos de US$50 millones o más, y un 1% adicional sobre los activos de más de US$1.000 millones. Se estima que podría generar cerca de US$3 billones en ingresos fiscales durante 10 años.

No todos los demócratas aceptan el impuesto a la riqueza porque muchos creen que sería difícil evaluar objetivamente el valor de la riqueza como el arte y las joyas. También existe la preocupación de que tal impuesto sea inconstitucional debido a que el Gobierno federal tiene prohibido gravar impuestos sobre la propiedad, y solo puede recaudar a partir de los ingresos.