Las acciones de Tesla Inc bajaron a su menor nivel en casi dos años este miércoles, después de que el presidente ejecutivo, Elon Musk, vendió US$3.950 millones en papeles del fabricante de vehículos eléctricos.
Las acciones de la compañía perdían un 6,1%, a US$179,66, en los negocios de la tarde.
Analistas dijeron que la última venta en Tesla está generando nerviosismo por el impacto que pueda tener en la compañía la decisión de Musk de concretar la compra de Twitter.
La reciente adquisición de Twitter por parte del multimillonario generó preocupaciones entre los inversionistas de que pueda distraerle de la gestión de Tesla o llevarlo a derivar recursos hacia la compañía de redes sociales.
Musk vendió otro lote de acciones de Tesla Inc. para ayudar a financiar su compra de Twitter Inc., lo que eleva las ventas de sus acciones en el fabricante de vehículos eléctricos a cerca de US$36.000 millones en el último año.
Musk se deshizo de 19,5 millones de acciones por valor de US$3.950 millones en las últimas transacciones, según documentos regulatorios presentados el martes por la noche en Nueva York.
Los documentos no señalan que las ventas, las primeras desde agosto, fueran planificadas con anterioridad.
Venta de emergencia
La información se conoce a pesar de que el director ejecutivo de Tesla y mayor accionista individual había asegurado que no vendería más acciones de la empresa.
Musk afirmó en abril que no había más transacciones planificadas, luego lo reiteró en agosto, diciendo que era importante evitar una “venta de emergencia” en caso de que necesitara cerrar la adquisición de Twitter y tuviera problemas para atraer socios de capital adicionales.
Compra de Twitter
La persona más rica del mundo siguió adelante con su adquisición de la plataforma de redes sociales en octubre, después de pasar meses tratando de retirarse de ella. No está del todo claro cómo se financió finalmente el acuerdo de US$44.000 millones, más allá de los compromisos de deuda por cerca de US$13.000 millones de bancos de Wall Street.
Varias personas adineradas prometieron invertir alrededor de US$7.000 millones, aunque no se sabe si todos cumplieron sus promesas. Y Musk nunca ha dicho públicamente cómo planeaba reunir su parte del efectivo necesario para cerrar el acuerdo.
Pero una cosa está clara: Twitter está perdiendo dinero y ahora enfrenta pagos de intereses anuales de casi US$1.200 millones.
Este kiércoles Musk dijo que Twitter está considerando formas de incentivar a la gente a conectar sus cuentas bancarias o de tarjetas de crédito a la red social, posiblemente incluso la idea de transferir dinero al servicio como un banco.
En una sesión de Twitter Spaces Musk dijo que quiere “hacer que el sistema sea lo más útil posible”. Las herramientas financieras son parte de los cambios radicales que el multimillonario está explorando después de adquirir la empresa el mes pasado por US$44.000 millones.
“Cuanto más útil y entretenido sea el sistema, más personas lo usarán”, dijo.
Desde que Musk asumió el control, varias empresas importantes han suspendido sus anuncios en la plataforma, a la espera de ver cómo evolucionará bajo el liderazgo del multimillonario.
“Pareciera que Musk se está preparando para que las cosas sigan mal en Twitter durante el próximo año”, señaló Gene Munster, de Loup Ventures, después de que se hicieran públicas las ventas de acciones. “Se está preparando para que Twitter sea un gastadero de dinero”, añadió.
Ni Musk, de 51 años, ni su mano derecha financiera, Jared Birchall, respondieron a una solicitud de comentarios enviada por correo electrónico.
Las drásticas medidas del multimillonario para reducir costos, incluido el despido de la mitad del personal, para luego pedirles a algunos que regresaran, y la reorganización de las operaciones de la plataforma se han traducido en dos agitadas semanas en la compañía de redes sociales, incluso hay empleados que no tienen del todo claro si todavía están contratados o no.
El acuerdo también ha despertado la preocupación entre algunos accionistas de Tesla de que el director ejecutivo se está expandiendo demasiado y que tendría que deshacerse de aún más de sus acciones. Todavía posee alrededor del 14% en Tesla, según datos de Bloomberg.
De los US$36.000 millones en acciones que Musk ha vendido, alrededor de la mitad se vendió desde que hizo público el plan de compra de Twitter, según muestran datos compilados por Bloomberg. La caída de las acciones de Tesla ha reducido el patrimonio de Musk de un máximo de US$340.000 millones a US$179.500 millones en la actualidad, según el índice Bloomberg Billionaires.