Wall Street pasa por su peor momento del año debido a la gigantesca ola vendedora que ha afectado en las últimas semanas a las grandes empresas tecnológicas de EEUU.
Y el Nasdaq, precisamente, es el que más está sufriendo. De hecho, en estos momentos, sufrió una severa contracción de 1,70%, hasta 6.908,82 enteros, y se aproxima también a los números rojos, ya que su avance anual se ha reducido hasta el 0,08%.
En ese adverso contexto, el Dow Jones perdió un 2,21%, mientras que S&P 500 se deja un 1,82%. Ambos indicadores vuelven al terreno de los números negativos en el balance de 2018.
Esta caída alienta a las voces que creen que se puede estar en presencia de la gran corrección de los mercados. Cabe recordar que en septiembre, las bolsas estadounidenses alcanzaron récords y que la debacle de las empresas tecnológicas (Amazon y Apple superaron el billón en market cap) ha generado una caída de 8% en el índice S&P 500 desde esa fecha.
La ola vendedora ha tenido como telón de fondo la guerra comercial, el aumento de las tasas de interés (que nunca son del agrado del mercado) y últimamente las dudas que genera el mercado gigantesco de los semiconductores y la caída en la demanda de los iPhone, negocio que representa dos tercios de las ventas de Apple, la empresa más valiosa del mundo en bolsa.