Como una “locura” desde el punto de vista fiscal calificó Nicolás Eyzaguirre la extensión del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE), si es que esta medida de apoyo social anunciada ayer coincide con un cuarto retiro de fondos de las AFP. Y no solo eso, sino que además advirtió que ambas políticas podrían generar un sobrecalentamiento de la economía.

El economista reconoció la existencia de acuerdos entre los distintos sectores políticos sobre las medidas económicas que se han tomado “desde el punto de vista macro”. Sin embargo, alertó que aún no se ha visto una total recuperación debido al millón de personas que todavía se encuentran desempleadas, por lo que llamó a impulsar políticas orientadas a los grupos más afectados.

“Las políticas más macro, tipo IFE generalizado, tienen que comenzar a ir en retirada, y (privilegiar) más las políticas más orientadas a esa gente que ha sufrido con esta cuestión”, afirmó el exministro de Hacienda durante el programa “El Primer Café”, de radio Cooperativa.

El exjefe de la billetera fiscal de los gobiernos de Ricardo Lagos y Michelle Bachelet dijo que hay que dedicarse “fuertemente” a ver cuáles son los mejores instrumentos para llegar a esas familias.

Eyzaguirre sostuvo que los niveles de deuda pública “no son peligrosos”, pero que “no tenemos por qué comenzar a hacer locuras desde el punto de vista fiscal ni monetario en tan breve plazo (...) Hay que tratar de evitar que la economía se nos sobrecaliente”.

Nuevo giro de fondos

En ese contexto, el economista se mostró crítico sobre un cuarto retiro de fondos desde las AFP, el que, en su opinión, producirá más capacidad de gasto “en una economía que puede comenzar a tener problemas inflacionarios”.

“Lo más importante es que este discurso de que ‘la plata es mía y nada más que mía’ se derrota a sí mismo (...) Las pensiones son obligatorias, porque la sociedad no puede hacerse cargo enteramente de la tercera edad y la gente tiene que proveer para su vejez. Y lo que estamos viendo con los retiros es que estamos devolviéndonos a un sistema donde no hay seguridad social”, comentó.

Sobre ese punto, se mostró a favor de cambiar hacia un sistema de seguro colectivo. A juicio del exministro, “el problema es el intermediario”, es decir, las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP). “Lo que hay que tener como en Canadá y en otras partes, es una institución pública única que recaude y que esto se licite en fondos internacionales que son súper competitivos y que te dan buena rentabilidad”, planteó.

Y apuntó a que el gran problema es que si las personas gastan toda la plata y quedan sin fondos, “va a caer todo a espaldas de los contribuyentes que también van a tener que estar financiado mejor educación, mejor salud, mejor infraestructura. Entonces, si queremos generar un Estado con derechos sociales, no comencemos a gastarnos toda la plata por malas medidas de retiros de lo que hay”.