En cuanto el experto en fondos de cobertura Hans Humes se enteró del sorpresivo resultado de las elecciones primarias de Argentina, celebradas el 11 de agosto, comenzó a buscar pasajes aéreos en internet.
Humes es uno de muchos inversionistas que viajaron a Buenos Aires para reunirse con los líderes izquierdistas que ahora probablemente asumirán el control del país, algunos desesperados por recuperar sus alicaídas inversiones y otros buscando oportunidades tras la venta masiva.
Desde entonces, administradores de fondos como BlackRock Inc., Pacific Investment Management Co., Goldman Sachs Group Inc. y otros se han reunido con asesores del candidato de oposición, Alberto Fernández, o han hablado con ellos por teléfono.
El mensaje de al menos uno de esos asesores de campaña, Emmanuel Álvarez Agis, exviceministro de Economía del gobierno populista de Cristina Fernández de Kirchner, fue sorprendentemente alentador.
"Me pareció que tenía una buena idea de cómo deberán encontrar el equilibrio para ganar las elecciones, pero no espantar a los mercados", dijo Humes, director ejecutivo de Greylock Capital, en Nueva York. Incluso partidarios del presidente argentino, Mauricio Macri, "hablaron muy bien de él".
Los inversionistas necesitan mucha tranquilidad. Después de la aplastante victoria de Fernández, el peso cayó a un mínimo histórico, las acciones sufrieron la segunda caída más grande en 70 años y los swaps de incumplimiento crediticio indicaron una probabilidad de incumplimiento mayor a 75% en cinco años.
Efecto Kirchner
Si bien Fernández ha mostrado un tono más moderado, muchos inversionistas se mantienen cautelosos ante el hecho de que Cristina Kirchner está en el paquete, que su exministro de Economía Axel Kicillof probablemente ganará las elecciones para el cargo de gobernador de la provincia más importante y que la lista de legisladores de la oposición está repleta de miembros del grupo de izquierda más radical, conocido como La Cámpora.
Pese a todo el encanto de Álvarez Agis, él fue miembro de un gobierno que promulgó controles de capital e incumplió deuda como parte de un conflicto con tenedores de bonos no reestructurados.
Pero ahora, Álvarez Agis, como alguien que podría ser miembro clave en el equipo económico para fin de año, les dice a los inversionistas lo que quieren escuchar; como la necesidad de mantener el acceso al mercado, mantener la disciplina fiscal y atraer inversión sin el incumplimiento de pasivos con tenedores de bonos o acreedores multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), que el año pasado otorgó a Argentina un préstamo récord de US$56.000 millones.
Representantes de BlackRock, Pimco y Goldman declinaron hacer comentarios.
Entre otros asesores se encuentran Guillermo Nielsen, exsecretario de Finanzas durante el gobierno del expresidente Néstor Kirchner, además de Matías Kulfas y Cecilia Todesca.
Fernández no ha informado formalmente quién desempeñaría cargos en el futuro gabinete o el banco central si gana las elecciones generales en octubre.
"Lo que el mercado necesita escuchar es un compromiso con un respaldo fiscal y un programa del FMI", dijo Siobhan Morden, estratega de Amherst Pierpont Securities, con sede en Nueva York.
También se encuentran en Buenos Aires esta semana funcionarios del FMI para reunirse con el gobierno de Macri, así como con Fernández y sus asesores, incluidos Nielsen y Todesca. Después de una reunión inicial el lunes, Fernández señaló que estuvo de acuerdo con los principales objetivos del programa del FMI.