El presidente de EEUU Donald Trump le dijo a una multitud que un automóvil deportivo Chevy Camaro cuesta hasta US$119.000 en China. Él está equivocado.
"Cuando hacemos un automóvil, lo vendemos a China y hay un arancel del 25% y eso es solo el comienzo", dijo en un discurso en Virginia Occidental, y agregó que el Camaro cuesta tres veces más de lo que se vende en Estados Unidos. "Lo entienden, ¿verdad? Es todo impuestos, impuestos e impuestos. No podemos hacer eso nunca más".
Aquí está el hecho: se vende solo un modelo de Camaro en China, un cupé con un motor turbo de 2.0 litros, según una portavoz de General Motors Co., firma que fabrica el automóvil. El vehículo se vende por 399,900 yuanes (US$58.430) en el país asiático, según el sitio web local de la automotriz con sede en Detroit. Eso se compara con un precio inicial de US$25.905 para un modelo cupé Camaro similar en Estados Unidos
Trump hizo los comentarios justo antes de que entre en vigencia una nueva ronda de aranceles de cada uno de los países sobre bienes por un valor de US$16.000 millones, lo que profundiza una guerra comercial entre las dos economías más grandes del mundo. Trump espera que los aranceles aplicados a las importaciones chinas estimulen las inversiones en EEUU en lugar de China, apuntalando la demanda interna y creando más empleos en Estados Unidos.
La economía china de aproximadamente US$12 billones ha reducido constantemente la brecha con la estadounidense, que es de aproximadamente US$19 billones. Se pronostica que el producto interno bruto de China crecerá 6,6% este año, según las estimaciones compiladas por Bloomberg, lo que representaría el ritmo más lento desde 1990. Se estima que la economía de EEUU crecerá un 2,9%.