Buenos números mostró ayer el CEO de Mowi, Alf-Helge Aarskog, al presentar los resultados trimestrales de la compañía. De hecho, se trató del mejor segundo cuarto en la historia de la salmonera noruega (ex Marine Harvest), con un incremento de 26% año contra año de sus volúmenes de producción.

Y la operación en Chile estuvo en línea con ese buen desempeño.

Los volúmenes de su unidad en el país aumentaron en 6% en comparación con el segundo trimestre de 2018, lo que estuvo en línea con el presupuesto de la firma. El EBIT operacional, en tanto, alcanzó los 28,2 millones de euros en el segundo trimestre, versus los 18,3 millones de euros del mismo periodo de 2018.

Los efectos del aumento de los volúmenes y la reducción de los costos de operación durante el periodo "más que compensaron el efecto de los precios más bajos". En efecto, el precio de referencia de Urner Barry para el salmón chileno bajó un 9% en comparación con el segundo trimestre de 2018, indicó la firma. El precio promedio por libra de filete en el trimestre (Urner Barry D-trim 3-4 lb) fue de US$ 5,34. "Nuestro precio logrado para el salmón chileno fue el precio de referencia en el trimestre. La contribución de los contratos en relación con el precio de referencia fue positiva en el segundo trimestre de 2019, pero negativa en el trimestre comparable".

En tanto, el volumen cosechado fue de 15.118 toneladas de peso destripado en el segundo trimestre, lo que representa un alza de 53,4% respecto del mismo periodo de 2018, lo que se debe al aumento de las existencias de smolt.

La firma detalló en su análisis de resultados que el aumento de las medias del smolt sugiere un mayor crecimiento en el futuro. Sin embargo, el peso promedio de la cosecha ha disminuido gradualmente en 2019.

Un tema que preocupa a Mowi es el aumento en los niveles de piojos de mar, así como de la mayor resistencia a los tratamientos médicos.