El trabajo de los ocho coordinadores económicos que revisaron el programa ya terminó. La propuesta está en manos del candidato del Frente Social Cristiano, José Antonio Kast, para ser analizado por su equipo político.
Los plazos eran ajustados debido a que el sábado las candidaturas deben entregar un nuevo programa o programa ajustado al Servel en función del inicio de la campaña oficial de segunda vuelta. Y por ello, se espera que el anuncio sobre el giro que tendrá lo económico se produzca este viernes.
Las primerias definiciones apuntan a que en corto plazo no habrá baja de impuestos ni a las empresas ni menos al IVA, tal como lo proponía originalmente el programa. Para el caso del gravamen de las empresas se establecía que pasarían de 27% actual a un 17%, mientras que la tasa IVA se reduciría en dos puntos reduciéndose de 19% a 17%.
Cualquier cambio en esa dirección estará supedita al crecimiento, pero siempre pensando en el mediano plazo. Esto porque el crecimiento pasará a tener un rol principal en todas las medidas que se quieran impulsar y, por ende, condicionará otras políticas que se quieran realizar.
Otro de los puntos donde ya hay una definición entre los economistas es en la meta de crecimiento. Si bien el programa se planteaba como meta que Chile crezca a tasas de 5% a 7% anual, duplicando en una década el ingreso por persona, cruzando el umbral del desarrollo, eso quedó atrás y ahora el documento que le entregaron los economistas se centra en elevar el PIB tendencial.
Según indican, hoy el PIB de mediano plazo se ubica entre 2% y 2,5% y, por ello, la meta que le entregaron a Kast apunta a subirlo a un rango de entre 3% y 4%. Si bien no establecieron meta de PIB efectivo, se menciona que el hecho de fijar un objetivo de 4% al final de período apunta a que el crecimiento anual vaya avanzando en esa dirección.
En el equipo sostienen que a medida que se avance en el crecimiento se podrá también avanzar en mayores entregas de transferencia fiscales. También indican que habrá énfasis en una mayor certeza jurídica, mayor seguridad pública y paz social, ya que todos esos elementos son importantes para mejorar el clima de inversiones y, por ende, del crecimiento.
Afirman que lo que se busca es no tener un Estado más grande, sino que más eficiente. Y eso se logra-dicen- con crecimiento, porque les dará un mayor espacio para ir desarrollando políticas sociales.
Otro ítem donde hubo definiciones entre los coordinadores es en mantener la responsabilidad fiscal y, por esto, fijaron que la deuda pública como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB) se sitúe en torno a 45% al final de su gobierno.
Los ajustes al programa se hicieron considerando los tres ejes que se definieron el pasado jueves: crecimiento económico, responsabilidad fiscal y bienestar social.
Otro eje donde habrá modificaciones, aunque menores en comparación a los puntos mencionados con anterioridad es pensiones. En lo conversado entre los economistas está el consenso de que se debe introducir mayor competencia a la industria de las AFP, y por ello se analizó las fallas de ingreso que puede haber. Esto porque son pocos los actores que compiten en este mercado. Entre las propuestas se debatió cuánto será el alza en la cotización individual y se acordó entregar la propuesta con un incremento entre 4% a 6% para que sea una definición a nivel más político. También se dijo que se puede estudiar, pero para el mediano plazo, la idea de fijar una cotización vía consumo.
El nuevo equipo económico está integrado por Cecilia Cifuentes, José Luis Daza, Sebastián Claro, Eduardo Guerrero, Patricio Rojas, Sylvia Eyzaguirre, Claudio Lucarelli y Soledad Arellano.