Nuevo llamado de Corfo a productores especializados entregará el 25% del litio que produzca Albemarle hasta 2043
Se trata de una cuota estimada actualmente en cerca de 9.500 toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE), pero que podría aumentar si la firma norteamericana consigue activar la cláusula que casi duplica su cuota en el Salar de Atacama. La agencia afirma que ya hay 12 empresas de distintos países interesadas en el proceso.
El gobierno anunció la puesta en marcha del tercer llamado a productores especializados de litio, para adjudicarse la cuota del mineral blanco que aún tenía que adjudicar: el 25% de la producción de carbonato de litio equivalente (LCE, por sus siglas en inglés) que genera Albemarle en el Salar de Atacama.
El anuncio estuvo encabezado por el Presidente Gabriel Boric, en el marco del VII Foro Internacional de InvestChile, realizado este jueves en el Hotel Sheraton.
Allí el mandatario enfatizó en la relevancia de estos procesos, que asignan un cuarto de la producción de litio en Chile para que otras empresas realicen productos que agreguen valor.
“Nos importa mucho en esta materia que complejicemos nuestro modelo de desarrollo y que, por lo tanto, junto con las oportunidades que implica el litio hoy día en el mundo, seamos capaces también de generar encadenamientos productivos y transferencias tecnológicas”, dijo Boric.
El vicepresidente ejecutivo de Corfo, José Miguel Benavente, entregó los detalles del anuncio. La agencia estatal que lidera es la encargada de realizar el llamado internacional para que distintas empresas postulen por la cuota de litio, que se asigna a un precio preferente.
Según especificó, la convocatoria estará abierta “a más tardar a fines de julio, y las presentaciones de interés las recibirá Corfo justamente para sacar adelante esta iniciativa a fines de año, para poder hacer, tras la licitación, las asignaciones correspondientes”.
En diálogo posterior con la prensa, explicó que la asignación a la firma que resulte como adjudicataria será por un total de 9.500 toneladas de carbonato litio equivalente (LCE) al año, y que se extenderá “desde el momento que se adjudica, hasta el año 2043″.
De todas maneras, sostuvo que la cifra final puede crecer, “porque la regla dice que es el 25% de la producción”, y Albemarle acaba de conseguir la opción de duplicar su producción de litio, desde las actuales 50 mil toneladas LCE.
Pero Benavente enfatizó que “la licitación la vamos a hacer con una cantidad de toneladas definida, porque tenemos que asumir un compromiso, que son 9.500 tonelada LCE”.
Dado que el proceso se abriría a fines de julio, el líder de Corfo proyectó que el inicio para la producción del nuevo productor preferente “probablemente será para 2026″, pero no descartó que pueda darse incluso antes.
“Todos los que postulen, me imagino que tienen interés de empezar lo antes posible”, indicó.
Además, aseguró que a la fecha hay 12 empresas que han presentado interés por el proceso y que su procedencia es de distintos países.
Sin restricciones
Benavente agregó que, al igual que en los otros dos procesos, para la asignación de la cuota de Albemarle no se contempla imponer restricciones previas a las empresas de acuerdo a su país de origen. “Nosotros no tenemos ningún sesgo respecto de los países”, afirmó, en medio de la polémica queja planteada por la compañía china BYD, la primera firma que se adjudicó el estatus de productor preferente en Chile y que acusa demoras para encontrar el terreno para instalar su planta productiva.
Asimismo, Benavente enumeró los criterios que se utilizarán para definir al ganador de la nueva licitación de litio a precio preferente.
“El que entregue mayor valor agregado como primera variable; segundo, mayor inversión; tercero, mayor empleo; cuarto, qué porcentaje de ese empleo es de chilenos; quinto, entrenamiento y capacitación; y sexto, locación”, puntualizó.
Ahondó en que si bien en las dos licitaciones pasadas ambas compañías presentaron ofertas para elaborar productos llamados LiFePo, material catódico, la idea es que ahora el nuevo productor especializado oferte productos de mayor valor agregado.
“Por lo menos en las expresiones de interés, lo que nos han hecho saber es que ellos quieren ir más abajo incluso, es decir, mayor valor agregado, y vemos que hay una oportunidad, porque la hipótesis que tenemos es que hay la posibilidad de hacer baterías en Chile, pero no necesariamente baterías de autos, sino de conservación de energía, de almacenamiento, porque se van a necesitar para el hidrógeno verde”, señaló.
Un factor juega a favor de dicha apuesta: las baterías de auto tendrían que salir de Chile para ser ensambladas en los países que producen vehículos eléctricos, pero no necesariamente así las para almacenamiento de sistemas eléctricos, dado que el país está también bien posicionado en la carrera por producir hidrógeno verde, lo que generaría una demanda interna por esos nuevos productos.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.