Dos semanas consecutivas de bajas completaron las bencinas dando un alivio a los bolsillo de los consumidores, luego 54 semanas de incremento de su precio.La primera fue una leve reducción de $0,5 para la de 93 y de $1,3 por litro para la de 97 octanos y la reciente reducción fue un poco mayor. De acuerdo a lo que informó la Empresa Nacional del Petróleo (Enap) la bencina de 93 octanos tuvo una disminución de $10 por litro, mientras que la de 97 bajará $5,6 por litro.
Así, el precio de la bencina de 93 octanos se ubica en $1.278 mientras que la de 97 octanos en $1.322 y la de 95 octanos en $1.297.
Los expertos esperan que esta tendencia continúe durante las próximas dos a tres semanas, sin embargo, por razones estructurales, la visión de mediano plazo apunta a que difícilmente el precio de la gasolina de 93 octanos- que es la más consumida por los automovilistas-baje de los $1.200, siendo este un nuevo piso para este tipo de combustible al menos para los próximos 6 a 12 meses.
Antes de la pandemia, el valor se ubicaba en $837, y cuando comenzó la racha alcista de los precios la gasolina se situaba en $ 889, por lo que esta nueva barrera deja en términos comparativos con lo que había antes de la crisis en niveles altos.
Si bien los expertos afirman que la reciente disminución de precios del petróleo y del margen de refinación de gasolina, sumada a la apreciación del tipo de cambio local se debería reflejar más rápidamente en el precio al consumidor, el funcionamiento del Mecanismo de Estabilización del Precio de los Combustibles (Mepco) ha evitado que estas caídas sean traspasadas a público. Esto porque este mecanismo precisamente lo que busca es evitar las bajas y alzas bruscas en los precios finales.
Por otro lado, los economistas describen que existen riesgos externos que podrían evitar la caída de precios en Chile, entre ellos está la temporada de huracanes en Estados Unidos, un menor suministro de Rusia a causa de las sanciones de Europa sumado a una mayor demanda estacional en invierno. Y conflictos geopolíticos en curso en Irak y libia que podrían limitar la oferta de petróleo
“Considerando que el precio del petróleo se redujo en 22% oscilando ahora en los US$92 por barril y que el tipo de cambio oscila en torno a $900 es probable que gasolina de 93 empiece el 2023 en torno a los $1.220 si se mantienen las condiciones actuales”, sostiene el Coordinador Económico en Cambio Climático, Energía y Medio Ambiente de Clapes UC, Luis Gonzáles.
Una visión similar entrega el economista senior del Observatorio del Contexto Económico de la Universidad Diego Portales (OCEC-UDP), Juan Ortiz: “El piso en el mediano plazo efectivamente podría estar en $1.200, debido principalmente a una reducción de los costos de internación, en medio de menores costos de fletes y seguros”. En ese sentido añade que “para el tipo de cambio se estima una tendencia a una mayor apreciación respecto al valor presente, mientras que, para el mercado petrolero, las fuerzas han llevado a un ajuste en el precio, el cual no se estima hoy más allá de US$ 100 dólares”.
Erik Haindl, director de Vantrust Capital Corredora de Bolsa argumenta que en el escenario actual “hay hartas posibilidades de que Europa y Estados Unidos entren en recesión lo que llevaría a que el precio del petróleo se reduzca, pero en Chile el valor del dólar debería tender a subir generando efectos contrapuestos”. Entonces, para el exdecano de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Gabriela Mistral si bien “en el corto plazo veremos caídas en el precio de las bencinas, la perspectiva para mediano plazo es que las bencinas no caerán de los $1.200″.
Michelle Labbé, economista Jefe de Dominus Capital entrega una visión más cauta en cuanto al nivel de los precios, no obstante, si comparte que la tendencia es a la baja para las próximas semanas. “El mercado está sumamente volátil por lo que es difícil proyectar a mediano plazo. Lo que se puede predecir es que uno tendería a pensar que, de no pasar nada grave, deberíamos tener una tendencia a la baja”.